MADRID, 18 Sep. (EUROPA PRESS) -
La presidenta interina de Bolivia, Jeanine Áñez, ha destituido este viernes al fiscal general del país, José María Cabrera, en plena polémica por la decisión del Gobierno de privatizar una compañía eléctrica nacionalizada hace diez años.
"Que conste que hay unas situaciones que atentan al sistema democrático, a la transparencia, porque la remoción del suscrito Procurador General del Estado se da a petición del ministro de Gobierno, Arturo Murillo", ha dicho Cabrera tras ser notificado de su destitución.
La declaración de Cabrera ha sido difundida por su oficina de prensa mediante un vídeo que muestra a un abogado del Palacio de Gobierno llegando a su despacho con su sustituto, Alberto Morales, trayendo consigo una copia del decreto presidencial de cambio de autoridad.
El sucesor del fiscal general, que estaba en funciones desde diciembre pasado, había sido anticipado el jueves por el mismo Cabrera, que aseguró que el ministro de Gobierno, Arturo Murillo, intentaba echarlo del cargo por haber abierto en su contra un presunto caso de corrupción.
Cabrera ha insistido en que su destitución es consecuencia de su rechazo a la privatización de una empresa de distribución eléctrica anunciada el lunes por Áñez en el departamento de Cochabamba.
Asimismo, ha revelado que el ministro Murillo se ha negado hasta ahora a presentar la información legal solicitada sobre una compra de gases lacrimógenos efectuada hace siete meses y que está bajo investigación parlamentaria por denuncias de corrupción.