Angola pone fin a su mediación entre RDC y el grupo rebelde M23 tras los últimos varapalos al proceso

La decisión llega después de que los rebeldes no acudieran a una cumbre en Luanda por las sanciones de la UE

MADRID, 24 Mar. (EUROPA PRESS) -

El presidente de Angola, Joao Lourenço, ha anunciado este lunes el fin de su papel como mediador en el conflicto en el este de República Democrática del Congo (RDC) entre el Ejército y el Movimiento 23 de Marzo (M23), respaldado por Ruanda, después de la cancelación de un encuentro en Luanda para unas conversaciones directas entre el Gobierno de RDC y el grupo rebelde.

La Presidencia congoleña ha destacado en un comunicado que, "desde que la Unión Africana (UA) confió a Lourenço la responsabilidad de mediar en el conflicto entre RDC y Ruanda, Angola se ha dedicado con la mayor seriedad, energía y recursos a lograr una paz duradera en el este de RDC y a normalizar las relaciones entre los dos países vecinos".

Así, ha enumerado los "progresos significativos" logrados en las "sucesivas rondas de negociaciones", incluido el compromiso de RDC de "neutralizar a las Fuerzas Democráticas para la Liberación de Ruanda (FDLR)" y de Ruanda para "retirar a sus fuerzas de territorio congoleño hasta la frontera entre ambos países".

Sin embargo, ha lamentado que las cumbre prevista entre ambos países el 15 de diciembre de 2024 no salió adelante por la ausencia de Ruanda, tras lo que Kigali argumentó que había optado por no acudir a Luanda ante el rechazo de Kinshasa a iniciar conversaciones directas con el grupo rebelde.

En este sentido, la Presidencia angoleña ha recalcado que "Angola siempre creyó en la necesidad de negociaciones directas entre el Gobierno congoleño y el M23 y trabajó hacia este objetivo, logrando el consentimiento de ambas partes para una primera ronda (de contactos) que iba a tener lugar en Luanda el 18 de marzo".

"Sin embargo, este acto fue abortado a última hora debido a una combinación de factores, incluidos algunos elementos externos no relacionados con el proceso africano en marcha", ha recalcado, después de que el M23 anulara su participación en respuesta a las sanciones impuestas por la Unión Europea contra varios de sus integrantes.

Por otra parte, la Presidencia angoleña ha destacado en su comunicado, publicado en su cuenta en la red social Facebook, que aplaude "todas las acciones" de Naciones Unidas y otros países que "puedan contribuir a resolver los varios conflictos en el continente".

De esta forma, ha reseñado que la decisión de poner fin a su labor de mediación en el conflicto deriva además de "la necesidad de poner fin a esta responsabilidad para centrarse de forma más exhaustiva en las prioridades generales establecidas por la organización continental", en referencia a la UA.

"En colaboración con la Comisión de la UA, se tomarán las medidas necesarias en los próximos días para identificar al país cuyo jefe de Estado, con el apoyo de la Comunidad de Desarrollo de África Austral (SADC), la Comunidad de África Oriental (EAC) y los facilitadores, asumirá la mediación en el conflicto entre RDC y Ruanda", ha zanjado.

Por ahora, ni RDC, ni Ruanda ni el M23 se han pronunciado sobre la decisión de Angola, que había sido uno de los principales mediadores en el conflicto. Recientemente, los presidentes congoleño y ruandés, Félix Tshisekedi y Paul Kagame, respectivamente, se reunieron en Qatar para abordar la situación.

SITUACIÓN EN WALIKALE

Por otra parte, el portavoz de la Alianza Río Congo (AFC) --cuyo principal integrante es el M23--, Lawrence Kanyuka, ha confirmado que los rebeldes siguen presentes en la ciudad de Walikale, a pesar de su compromiso de retirarse del lugar, situación que achaca a las actividades de las Fuerzas Armadas congoleñas en la zona.

"En contra de lo que se indicó en el comunicado del domingo 23 de marzo, las Fuerzas Armadas de RDC y sus fuerzas aliadas no han retirado sus drones de ataque de Walikale. Esta situación retrasa el reposicionamiento de las fuerzas de la AFC/M23 en la zona", ha subrayado.

En este sentido, ha aseverado en un mensaje en su cuenta en la red social X que "conviene subrayar que este acto constituye un gran obstáculo al respeto del alto el fuego y compromete las iniciativas de paz en marcha", sin que las autoridades congoleñas se hayan pronunciado por ahora sobre estas acusaciones.

Fuentes locales citadas por la emisora congoleña Radio Okapi han confirmado que los rebeldes siguen presentes en el lugar, si bien han señalado que se han dividido en varios grupos, algunos de los cuales habrían iniciado su repliegue hacia Mubi, Ntoto e Itebero.

El M23, integrado principalmente por tutsis congoleños, ha logrado importantes avances territoriales durante las últimas semanas, una ofensiva que ha llevado a RDC a acusar directamente a Ruanda de desplegar tropas en su territorio para apoyar las operaciones del grupo rebelde en medio de los llamamientos regionales a un alto el fuego y un proceso de paz.

Las autoridades ruandesas acusan al Gobierno de RDC de reprimir a los tutsis congoleños, que suponen una minoría en el este del país africano, con apoyo de grupos armados como las FDLR --fundadas por hutus extremistas huidos tras el genocidio en Ruanda en 1994-- y otras milicias locales.