Hay 18 detenidos, entre los que estaría un hombre cercano al príncipe Mohamed que estuvo con él en su visita a España
Riad expresa su "profundo pesar" y recalca que los responsables rendirán cuentas ante los tribunales
MADRID, 20 (EUROPA PRESS)
El fiscal general de Arabia Saudí ha anunciado este sábado que las investigaciones de Riad en torno a la desaparición del periodista Yamal Jashogi apuntan a que murió en el interior del consulado del país en la localidad turca de Estambul.
Según las informaciones recogidas por la agencia estatal saudí de noticias, SPA, el fiscal general ha señalado que se registró una disputa entre Jashogi y varias personas en el interior del edificio que se saldó con su muerte.
Así, ha detallado que las investigaciones preliminares apuntan a que la "discusión" entre el periodista y estas personas "derivó en una pelea a puñetazos que se saldó con su muerte (...) y el intento de encubrir lo que había pasado".
El fiscal ha manifestado además que las investigaciones continúan en marcha y que se han saldado por el momento con la detención de 18 ciudadanos saudíes, cuyas identidades no han trascendido. Según la cadena Al Arabiya, los detenidos intentaron "persuadirle de que volviera" a Arabia Saudí.
Una vez producida la muerte, negaron que Jashogi permaneciera en el consulado e informaron a Riad de que el periodista "había abandonado a salvo" el edificio. Una fuente cercana a la investigación saudí ha confirmado a Al Arabiya que Maher Mutreb, un coronel de la Inteligencia saudí, fue elegido para la operación porque había trabajado con Jashogi en Londres.
Mutreb es uno de los saudíes próximos al príncipe heredero a los que el 'New York Times' consiguió identificar de entre el grupo de quince sospechosos señalados inicialmente por las autoridades turcas. Según informó esta semana el diario estadounidense, Mutreb trabajó en la Embajada saudí en Londres y acompañó al príncipe Mohamed en varios de sus viajes este año, incluidos los realizados a Estados Unidos, España y Francia, donde se le puede ver en las fotos tomadas durante las visitas.
Por otra parte, la fuente citada por Al Arabiya señala que el conductor del consulado saudí en Estambul figura entre quienes entregaron el cadáver de Jashogi a un "colaborador local". Esta es precisamente la incógnita que queda por resolver, el paradero del cuerpo del periodista. Las autoridades turcas informaron el jueves de que estaban buscando en un bosque cercano a Estambul.
RIAD EXPRESA SU "PESAR" POR LO OCURRIDO
En otro orden de cosas, a través de SPA, el reino ha expresado "su profundo pesar por los dolorosos acontecimientos que han tenido lugar y subraya el compromiso de las autoridades para esclarecer los hechos y hacer que todos los responsables rindan cuentas ante los tribunales competentes del país".
Asimismo, SPA ha anunciado el cese del asesor para la Casa Real Saud al Qahtani, considerado como la mano derecha del príncipe Mohamed, y del 'número dos' de los servicios de Inteligencia, Ahmed Asiri, sin que se sepa si estas decisiones tienen relación con el caso.
Fuentes consultadas por la agencia Reuters señalan que Al Qahtani hablaba con frecuencia en nombre del príncipe heredero y que daba órdenes directas a altos cargos, incluidos algunos del aparato de seguridad.
Asimismo, personas del entorno de Jashogi y del Gobierno saudí han indicado que Al Qahtani intentó convencer al reportero de que regresara al reino después de que este se trasladara a Washington hace un año por temor a represalias.
En un mensaje publicado en Twitter en agosto de 2017, Al Qahtani escribió: "¿Creéis que tomo decisiones sin directrices? Soy un empleado y un fiel ejecutor de las órdenes de mi señor el rey y mi señor el leal príncipe heredero". Este sábado ha publicado un mensaje dando las gracias a ambos por la "gran confianza" que habían depositado en él.
En cuanto al otro alto cargo cesado, Asiri entró en el Ejército saudí en 2002, según los medios locales, y srivió como portavoz de la coalición militar que apoya al Gobierno de Yemen conformada en 2015 bajo la batuta del príncipe Mohamed. En abril de 2017, Asiri fue nombrado 'número dos' de la Inteligencia exterior mediante un decreto real.
Por otra parte, la citada oficial saudí también ha informado de que el rey Salman ha ordenado la formación de un comité ministerial encabezado por el príncipe heredero de Arabia Saudí, Mohamed bin Salman, que se encargará de reestructurar los servicios de Inteligencia. Según SPA, el comité no tiene que ver directamente con la investigación.
"NO HUBO ÓRDENES DE QUE LO MATARAN"
Un funcionario saudí familiarizado con la investigación de Jashogi ha asegurado que Mohamed bin Salman no tenía conocimiento de la operación específica que ha resultado con la muerte del periodista, según ha recogido la agencia Reuters.
"No hubo órdenes de que lo mataran o incluso lo secuestraran específicamente", ha señalado el funcionario, que ha hablado bajo condición de anonimato y ha añadido que había una orden permanente para que los críticos del reino regresaran al país.
"Mohamed bin Salman no tenía conocimiento de esta operación específica y ciertamente no ordenó el secuestro o asesinato de nadie", ha aseverado.
DESAPARICIÓN DE JASHOGI
El periodista, crítico con la cúpula saudí, fue visto por última vez el 2 de octubre tras entrar al consulado. Las autoridades del país árabe habían negado hasta ahora su muerte y aseguraron que había salido del edificio poco después.
La situación podría tensar aún más las relaciones entre Turquía y Arabia Saudí, dañadas en 2017 cuando Ankara decidió mantenerse del lado de Qatar tras la imposición de un bloqueo a Doha por parte de varios países de la región, encabezados por Riad.
Jashogi es un antiguo editor de diarios saudíes que reside en un exilio autoimpuesto en Estados Unidos. Como periodista ha entrevistado al fallecido líder de Al Qaeda Usama bin Laden. Asimismo, ha escrito varias columnas criticando las políticas saudíes hacia Qatar y Canadá, así como la intervención de la guerra en Yemen y la represión contra activistas y medios de comunicación del país.