Archivo - El ministro de Exteriores saudí, Faisal bin Farhan - Europa Press/Contacto/Saudi Press Agency - Archivo
MADRID, 29 May. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno de Arabia Saudí ha condenado este miércoles las continuas "masacres genocidas" del Ejército de Israel y sus ataques contra campamentos de desplazados palestinos en la ciudad de Rafá, en el sur de la Franja de Gaza, que han dejado más de 70 muertos desde el pasado domingo.
"(Arabia Saudí) condena y denuncia en los términos más enérgicos que las fuerzas de ocupación israelíes sigan cometiendo masacres genocidas contra el pueblo palestino sin disuasión, al continuar atacando las tiendas de los indefensos refugiados palestinos en Rafá, y las autoridades israelíes son plenamente responsables de lo que está sucediendo en Rafá y en todos los territorios palestinos ocupados", reza un comunicado del Ministerio de Exteriores saudí publicado en su cuenta de la red social X.
Riad también ha advertido de que las "flagrantes violaciones" de las resoluciones y leyes tanto internacionales como humanitarias por parte de Israel, apoyado por "el silencio de la comunidad internacional", está empeorando la ya grave crisis humanitaria y "pone en juego la credibilidad" del sistema de relaciones internacionales.
Es por ello por lo que Arabia Saudí ha instado a la comunidad internacional a "asumir sus responsabilidades" para acabar con "las masacres contra el hermano pueblo palestino" y para lograr que los responsables "rindan cuentas".
Cabe destacar que Arabia Saudí e Israel se encuentran en un proceso de normalización de relaciones diplomáticas que se vio frenado por los ataques del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) del 7 de octubre, que dejaron 1.200 muertos y 240 rehenes, y la posterior ofensiva israelí sobre la Franja de Gaza, que ha provocado la muerte de casi 36.100 palestinos.
Antes del inicio del conflicto en el enclave, las autoridades israelíes aseguraban estar "al borde" de un "histórico" acuerdo con Riad. El propio príncipe heredero saudí, Mohamed Bin Salmán, reconoció el 21 de septiembre de 2023 que la posible normalización "está cada vez más cerca", aunque esta tenía como condición previa el reconocimiento del Estado palestino en las fronteras de 1967, con Jerusalén Este como su capital.