MADRID, 5 Jun. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno de Arabia Saudí ha expresado este miércoles su "gran preocupación" por la represión contra manifestantes en Sudán, que se habría saldado con al menos cien muertos, y ha hecho un llamamiento al diálogo en el país africano.
Riad, uno de los principales respaldos internacionales de la junta militar sudanesa, ha mostrado su deseo de que "todas las partes en Sudán elijan la sabiduría y el diálogo constructivo para preservar la seguridad y la estabilidad del país, proteger a la población y mantener sus intereses y unidad".
Asimismo, ha recalcado la importancia de "reiniciar el diálogo entre las distintas partes en Sudán para satisfacer las aspiraciones del hermano pueblo sudanés", según ha informado la agencia estatal saudí de noticias, SPA.
Las autoridades saudíes han mostrado además su "inamovible posición de apoyo a Sudán y su población" y ha abogado por mantener la "seguridad, estabilidad y prosperidad" en el país, al tiempo que ha pedido "superar rápidamente las actuales circunstancias y desafíos".
Por último, ha expresado sus "profundas condolencias" a los familiares de las víctimas y a la población sudanesa en general, antes de desear una pronta recuperación a los heridos por la represión de las fuerzas de seguridad.
El Comité Central de Médicos de Sudán, una organización afín a la oposición, ha elevado durante la jornada a cien el número de muertos por la intervención de las fuerzas de seguridad contra la sentada de protesta frente al Ministerio de Defensa en Jartum.
"Informamos con tristeza de que 40 cuerpos fueron recuperados del río Nilo ayer", ha indicado en un comunicado publicado en su perfil en Facebook.
"Fueron llevados con vehículos que pertenecen a las milicias janjawid a un destino desconocido", ha precisado la organización, en referencia a las fuerza paramilitares que combatieron en Darfur y que posteriormente dieron paso a las Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF, por sus siglas en inglés), a las que se ha acusado de atacar y disparar contra los manifestantes.
Horas antes, la asociación médica había informado de que en base a las informaciones de las que dispone había 60 muertos y 326 heridos, muchos de los cuales se encuentran en estado critico, si bien ya había anticipado que el balance de muertos se espera que sea "mucho mayor".
En su último comunicado, ha denunciado que se mantiene suspendido el servicio de Internet y hay problemas con la telefonía móvil. "En medio de este apagón mediático, las milicias del Consejo de Transición (la junta militar en el poder) siguen matando y aterrorizando a personas inocentes indefensas en las calles y dentro de las casas en Jartum y en todo el país, aumentando el número de muertos y heridos en todos los hospitales", ha asegurado.
MANO TENDIDA
El nuevo balance de víctimas se conoce después de que el líder de la junta militar, Abdelfatá al Furhan, se haya ofrecido a retomar el diálogo con la oposición para lograr una transición democrática. En un discurso con motivo del final del Ramadán, Burhan ha rendido homenaje a las movilizaciones que comenzaron en diciembre y que derivaron en abril en el derrocamiento y la detención del entonces presidente, Omar Hasán al Bashir.
El líder del Consejo Militar de Transición, que asumió las riendas del país africano tras la caída de Al Bashir, ha reiterado su voluntad de ceder el poder a una administración civil. "Tendemos nuestras manos a las negociaciones sin más cadenas que el interés de la patria", ha destacado Burhan, según informa Reuters.
El mensaje contrasta con el pronunciado el lunes, cuando el propio Burhan anunció que rompía los acuerdos con la oposición y que la junta organizaría por su cuenta elecciones en un plazo de nueve meses. Lo hizo tras la violenta dispersión de una protesta opositora en Jartum.
Sin embargo, la alianza que aglutina a los manifestantes y los principales grupos de oposición ha rechazado la invitación al diálogo. "No aceptamos la invitación del Consejo Militar de Transición (...) está imponiendo el miedo en los ciudadanos en las calles", ha señalado a Reuters Madani Abbas Madani, uno de los líderes de la Declaración de Fuerzas de la Libertad y la Democracia, que aglutina a varios partidos opositores y a la Asociación de Profesionales de Sudán (SPA), principal promotora de las protestas.
Por otra parte, la junta militar ha anunciado este miércoles que ha puesto en marcha una investigación en relación con la violencia registrada en los últimos días, incluidos los asaltos contra la acampada de protesta.
"El Consejo ha iniciado una investigación independiente (...) una investigación urgente y transparente con resultados rápidos", ha anunciado su 'número dos', el general Mohamed Hamdan Dagalo, más conocido como Hemedti. "Cualquier persona que haya cruzado la línea tiene que ser castigada", ha asegurado.