MADRID, 3 Feb. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno de Arabia Saudí ha anunciado que los ciudadanos que no se hayan puesto la dosis de refuerzo de la vacuna contra la COVID-19 no podrán abandonar el país, mientras que todos los viajeros llegados desde el extranjero deberán presentar un test negativo de coronavirus, independientemente de su grado de inmunización.
Arabia Saudí ha registrado en el último mes los peores datos de contagio de toda la pandemia, con cifras diarias que superan los 5.000 positivos. El Ministerio de Sanidad ha informado este jueves de 3.852 nuevos casos, hasta un total de 653.972 desde el inicio de la pandemia.
Al menos 8.947 personas han fallecido en Arabia Saudí víctimas de esta enfermedad, cuatro más que el miércoles, mientras que la cifra de pacientes graves ronda actualmente el millar, según la agencia de noticias oficial SPA.
Ante esta evolución epidemiológica, el Gobierno ha optado por revisar los requisitos de viaje, de tal forma que nadie podrá abandonar Arabia Saudí a partir del 9 de febrero si no ha recibido la tercera dosis de la vacuna en un plazo de tres meses después de la segunda, a excepción de los menores de 16 años.
Por otra parte, quienes quieran entrar en el país --también ciudadanos saudíes-- deberán presentar una PCR o un test de antígenos negativo realizado en las 48 horas previas al viaje. El Ministerio del Interior ha precisado a SPA que la medida es obligatoria para todos los mayores de ocho años, independientemente de que estén o no vacunados.
Quienes hayan pasado recientemente la COVID-19 podrán entrar sin esta prueba, siempre y cuando hayan pasado al menos siete días desde el positivo, en el caso de quienes ya hayan completado la pauta de vacunación con fármacos aprobados en Arabia Saudí. De lo contrario, el plazo se amplia a un mínimo de diez días.