LONDRES, 23 Jun. (EUROPA PRESS) -
Arabia Saudí está contemplando seriamente pagar los salarios de los combatientes del Ejército Libre Sirio, la principal fuerza de oposición armada al régimen del presidente Bashar Al Assad, para impulsar las deserciones entre las filas de Damasco a través de una iniciativa que ya se está discutiendo en Estados Unidos y el resto del mundo árabe.
Esta estrategia ha cobrado importancia en los últimos días, después de que la reciente remesa de armas llegada a los rebeldes desde Arabia Saudí y Qatar "está comenzando a tener un impacto en el campo de batalla sirio", según informa 'The Guardian'.
La idea, según explicaron al rotativo británico fuentes de tres estados árabes, comenzó a cobrar fuerza el pasado mes de mayo, cuando los líderes rebeldes recibieron el primer envío de armamento a través de la frontera con Turquía, que a su vez ha permitido el establecimiento de un centro de control en Estambul a través del cual se coordina el suministro de armas y que está compuesto por 22 personas, la mayoría de ellas de nacionalidad siria.
Las armas, entre las que se incluyen rifles, lanzagranadas, armas antitanque y munición, son introducidas a través de la frontera turca mediante una red de intermediarios, entre los que se encuentra el movimiento Hermanos Musulmanes sirio.
El Gobierno de Ankara ha desmentido estas informaciones y asegura que su prioridad es el cese de la violencia.
PAGO EN DÓLARES O EUROS
El pago de las tropas rebeldes se vería facilitado por la devaluación de la moneda del país, la libra siria, desde el inicio del conflicto hace 16 meses, lo que ha provocado un descenso dramático del poder adquisitivo. El dinero se entregaría bien en dólares o en euros, lo que significaría que los rebeldes disfrutarían de salarios equivalentes, o incluso superiores en algunos casos, a los que existían antes de la revolución.
Uno de los principales defensores de esta iniciativa en Estados Unidos es el senador independiente Joe Lieberman, quien considera que la oposición debería recibir "una paga regular y suficiente", aunque no cree necesario que Washington deba implicarse directamente en este proceso de financiación, según su portavoz Whitney Phillips.
El secretario de Defensa, Leon Panetta, mantiene que Estados Unidos no se implicará directamente ni en la financiación ni en el suministro de armamento. "Pero sé que otros ya han tomado sus propias decisiones", declaró Panetta en su momento.
Frente a estas declaraciones de Panetta, varias informaciones publicadas recientemente por los medios estadounidenses revelan que existen agentes de la CIA operando en el sur de Turquía para coordinar el suministro de armamento, y que al menos dos oficiales de inteligencia de EEUU están presentes en la ciudad de Homs --uno de los epicentros de la ofensiva contra Damasco-- para establecer una cadena de mando entre las filas rebeldes.
No obstante, Turquía ha rechazado toda implicación en el proceso de suministro de armas, al tiempo que ha subrayado que su prioridad es poner fin al derramamiento de sangre en el país árabe.
"No existe esa transferencia de armas a los países vecinos, incluyendo Siria", declaró el portavoz del Ministerio de Exteriores, Selçuk Ünal durante una rueda de prensa en Ankara, según ha recogido el diario turco 'Today's Zaman'.