Las autoridades de Argelia han abierto una investigación por corrupción contra siete empresarios y les han retirado el pasaporte para impedir su salida del país, un día después del arresto de Alí Hadad, antiguo presidente de la patronal y una figura muy cercana al presidente, Abdelaziz Buteflika.
Fuentes judiciales citadas por la cadena de televisión argelina Ennahar TV han señalado que todos los procedimientos estarán sujetos a la ley, sin dar detalles acerca de las identidades de los empresarios investigados.
La Fiscalía de Argel ha explicado en un comunicado que la medida ha sido adoptada en el marco de las "investigaciones preliminares" por supuesta corrupción y "transferencia ilícita de capitales hacia el extranjero", según un comunicado recogido por el diario local 'Tout sur l'Algerie'.
"Por las necesidades de las investigaciones, el fiscal general ante el tribunal de Sidi M'Hamed ha procedido a aplicar disposiciones (...) y ha adoptado medidas conservadoras al ordenar la prohibición de salida del territorio nacional contra varias personas", ha dicho la Fiscalía.
El arresto de Hadad tuvo lugar cerca de la frontera con Túnez, aparentemente cuando intentaba salir del país, sin que las autoridades se hayan pronunciado por el momento ni se sepa dónde se encuentra detenido.
La dimisión de Hadad el pasado jueves supuso un nuevo golpe para Buteflika y su cada vez menor círculo de personas de confianza, que se han ido alejando de él ante las masivas manifestaciones de las últimas semanas contra él.
En este contexto, el jefe de Estado Mayor del Ejército y viceministro de Defensa de Argelia, el general Ahmed Gaid Salá, ha abogado por aplicar el artículo 102 de la Constitución, que permite declarar incapacitado por motivos de salud al presidente del país, como vía para solucionar la crisis política en la que se encuentra sumida el país africano.
Sin embargo, la oposición reaccionó rápidamente rechazando en su mayoría las palabras de Salá e incidiendo en que las manifestaciones exigen la salida de la cúpula gobernante y un cambio en el sistema de poder, y no sólo cambios cosméticos o la sustitución de Buteflika por una persona de su entorno.
El mandatario, que ya retiró su candidatura a un quinto mandato y abogó por una conferencia nacional tras aplazar las elecciones --algo igualmente rechazado por la oposición y los manifestantes--, se ha estado dirigiendo al público en una serie de cartas para anunciar sus decisiones.