La votación tendrá lugar en medio de un clima de represión y la pandemia de coronavirus
MADRID, 27 Abr. (EUROPA PRESS) -
Los partidos políticos de Burundi han arrancado este lunes sus campañas electorales de cara a las presidenciales que se celebrarán el 20 de mayo para reemplazar a Pierre Nkurunziza, quien lleva en el poder desde 2005, en una votación que tendrá lugar en medio de la pandemia de coronavirus.
Las autoridades han validado un total de siete candidatos, entre los que destacan el 'delfín' de Nkurunziza, Evariste Ndayishimiye, y el líder del opositor Congreso Nacional para la Libertad (CNL), Agathon Rwasa, quienes han dado el pistoletazo de salida a sus campañas en Gitega y Ngozi, respectivamente.
El acto de Ndayishimiye en la nueva capital del país ha contado con la presencia de Nkurunziza, quien ha expresado en los últimos días su respaldo al candidato de su partido, que ha recibido además el apoyo de una sección del partido Uprona liderada por Isidore Mbayahaga.
Mbayahaga anunció el sábado que parte de la formación no respaldaría al candidato presentado por su propio partido, Gaston Sindimwo, y denunció la mala gestión por parte de la cúpula, mostrando así su adhesión a la candidatura de Ndayishimiye, según el portal burundés Iwacu.
Por su parte, el acto de Rwasa ha tenido lugar en el estadio de Muremera, donde se han concentrado miles de seguidores del Congreso Nacional para la Libertad (CNL), que la semana pasada denunció la "incitación al odio y la violencia" contra los miembros de la formación de cara a las elecciones.
Rwasa, líder de la milicia hutu Fuerzas de Liberación Nacional (NLF) durante la guerra civil en Burundi (1993-2005), anunció el 14 de febrero de 2019 la formación del CNL y figura como el principal candidato opositor en los comicios, marcados por el clima de miedo derivado de la crisis política que estalló en 2015.
El origen de la crisis fue la decisión de Nkurunziza de concurrir a las presidenciales de julio para un tercer mandato, algo que, según la oposición, violaba el acuerdo de paz alcanzado en 2015 para poner fin a la guerra civil.
El presidente logró revalidar su cargo en las urnas tras un fallido golpe de Estado, desatando con ello una ola de violencia con epicentro en la antigua capital, Buyumbura, que se cobró al menos 450 vidas, según varias ONG.
De hecho, una comisión de investigación de Naciones Unidas afirmó en septiembre de 2019 que el presidente burundés es personalmente responsable de graves violaciones de los Derechos Humanos en el país.
La organización no gubernamental Human Rights Watch (HRW) ha incidido este mismo lunes en que las autoridades y miembros del gubernamental Consejo Nacional para la Defensa de la Democracia-Fuerzas para la Defensa de la Democracia (CNDD-FDD) han usado el miedo y la represión contra opositores, medios independientes y activistas.
HABRÁ "MÁS ABUSOS" DURANTE LAS ELECCIONES
"La violencia y la represión han sido el sello distintivo de la política en Burundi desde 2015 y, mientras se acercan las elecciones y se desarrolla la pandemia de Covid-19, las tensiones están aumentando", ha alertado el director de HRW para África Central, Lewis Mudge.
Así, ha dicho que "hay pocas dudas de que estas elecciones estarán acompañadas de más abusos, ya que funcionarios burundeses y miembros de los Imbonerakure --el ala juvenil del CNDD-FDD, acusados de graves violaciones de los Derechos Humanos-- están usando la violencia con casi total impunidad para permitir que el partido gubernamental mantenga su control del poder".
La ONG ha indicado que sus investigaciones entre noviembre de 2019 y abril de 2020 revelan que se han registrado abusos en al menos seis de las 18 provincias del país, incluidos asesinatos, desapariciones, arrestos arbitrarios y amenazas contra miembros de la oposición o personas consideradas como vinculadas a la oposición.
Sin embargo, la ONG burundesa Ligue Iteka ha recalcado que los abusos están mucho más extendidos y ha dicho haber documentado 67 asesinatos, incluidas catorce ejecuciones extrajudiciales, seis desapariciones, 15 casos de violencia sexual, 23 de torturas y 204 arrestos arbitrarios.
Entre las personas asesinadas figura Marie-Claire Niyongere, 'número dos' del ala femenina del CNL, quien fue asesinada en noviembre en Muramvya después de haber sido violada, tal y como confirmaron las autoridades del país africano.
En este sentido, un activista ha relatado que tuvo que pasar al anonimato tras investigar el asesinato de un miembro del CNL en Buyumbura. "Miembros del partido gubernamental me acusaron de compartir información con defensores de los Derechos Humanos exiliados y lograron que el fiscal emitiera varias citaciones", ha añadido.
Los medios locales han informado además de la localización de numerosos cadáveres en varias zonas del país que fueron posteriormente enterrados por las autoridades y los Imbonerakure antes de que se llevaran a cabo los procesos de identificación y autopsia.
Por otra parte, las autoridades han dado poca información sobre varios enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad y los Imbonerakure y supuestos "criminales" en la provincia de Buyumbura, en medio de las denuncias sobre que las víctimas fueron ejecutadas tras su arresto.
CAMPAÑA CONTRA LA PRENSA
Las autoridades han incrementado además su campaña contra los medios de comunicación, incluidas las condenas en enero a dos años y medio de cárcel a cuatro periodistas de Iwacu por "amenazar la seguridad del Estado".
Iwacu anunció que apelaría la sentencia para intentar lograr la liberación de los periodistas, detenidos en octubre de 2019 en la localidad de Musigati tras ir al lugar a informar sobre un enfrentamiento entre el Ejército y el grupo rebelde RED Tabara, que opera desde República Democrática del Congo (RDC).
Asimismo, la cadena de televisión británica BBC anunció en julio de 2019 el cierre de sus oficinas y la suspensión de sus operaciones, más de tres meses después de que las autoridades le retiraran la licencia, el 29 de marzo de ese año. En concreto se prohibió a "todos los periodistas, burundeses o extranjeros" de BBC y la emisora estadounidense Voice of America trabajar o dar información.
El Consejo Nacional de Comunicaciones (CNC) suspendió las emisiones de la BBC a raíz de un documental sobre asesinatos por parte de las fuerzas burundesas en un centro de detención secreto en Buyumbura, acusaciones rechazadas por las autoridades.
VOTACIÓN PESE AL CORONAVIRUS
La votación se celebrará además a pesar de la presencia de coronavirus en el país, que ha dejado hasta la fecha un total de 15 casos y un fallecido, según los Centros de África para el Control y la Prevención de Enfermedades (África CDC), dependientes de la Unión Africana (UA).
De hecho, el portavoz de la Presidencia destacó entre los motivos para no cancelar las elecciones que los burundeses "son un pueblo bendecido por Dios", mientras que las autoridades han bloqueado en varias ocasiones el acceso de ciertos medios a las ruedas de prensa en las que se informa sobre la evolución de la pandemia.
"Nos dijeron que éramos enemigos de la nación y que no se nos permitía entrar" a la rueda de prensa, ha destacado un periodista en declaraciones a HRW. Sin embargo, medios como RTNB, Rema FM y Mashariki TV, cercanos al CNDD-FDD, sí están acudiendo a estos actos.
La pandemia ha llevado a las autoridades, por contra, a anunciar que los burundeses residentes en el extranjero no podrán participar en la votación debido a las restricciones en sus países de residencia.
Por otra parte, HRW ha denunciado que las autoridades no han garantizado suficiente comida, atención médica ni medidas de higiene en varios centros de cuarentena, al tiempo que han bloqueado además el acceso de organizaciones humanitarias para entregar ayuda.