MADRID, 23 Oct. (EUROPA PRESS) -
El exministro del Interior italiano y líder del partido de ultraderecha La Liga, Matteo Salvini, comparecerá hoy ante un tribunal de Palermo (Sicilia) para responder de las acusaciones de privación de libertad y abuso de autoridad al impedir en 2019 el desembarco del barco de rescate español 'Open Arms'.
Salvini se enfrenta a un máximo de 15 años en prisión por declarar esta prohibición, uno de los puntos álgidos en su lucha contra la ola migratoria, durante un juicio en el que también se discutirá el papel jugado por la entonces asesora del Gobierno y ahora ministra del Interior, Luciana Lamorgese, y el entonces ministro de Trabajo y Políticas Sociales, ahora ministro de Exteriores, Luigi Di Maio.
De acuerdo con la información suministrada en su momento por la ONG Open Arms, el barco de rescate se dirigió en agosto de 2019 a Sicilia con más de 160 migrantes rescatados en tres operaciones como parte de su viaje de salvamento número 65.
El barco llegó a Lampedusa a mediados de agosto pero no se le permitió desembarcar a pesar de la crítica situación humanitaria de los migrantes que transportaba. Al final, la Fiscalía decidió apropiarse del barco para permitir el atraque. Para entonces quedaban en el navío 147 migrantes; el resto había sido desembarcado de urgencia para recibir atención médica.
Salvini, según el pliego de cargos recogido por 'La Repubblica', "había provocado la privación ilegítima de la libertad personal de los migrantes mencionados, obligándoles a permanecer a bordo del barco por un tiempo legalmente apreciable, precisamente, desde la noche entre el 14 y el 15 de agosto de 2019 hasta el 18 de agosto de 2019"
"Hecho agravado", continúa la acusación, "por haber sido cometido por un funcionario público, con abuso de las facultades inherentes a sus funciones, así como por haber sido cometido incluso en perjuicio de menores", en referencia a jóvenes rescatados que se encontraban en el barco.
Correspondía al ministro del Interior, "como autoridad nacional de seguridad pública", asignar el "puerto seguro" al barco, de ahí la imputación a Salvini, a quien el tribunal le considera "protagonista indiscutible" dado que el entonces el primer ministro, Giuseppe Conte, instó al desembarco de los menores.
Salvini ha asegurado todo este tiempo que actuó en defensa de Italia y de los intereses del Gobierno, y se defendió diciendo que existía el riesgo de desembarcar contrabandistas, que se habían escondido entre los migrantes. El tribunal ha rechazado esta versión de los eventos. "En ninguno de los accesos a bordo por parte de las autoridades italianas los migrantes mostraron jamás ningún indicio de condiciones de peligro, específicas, concretas y objetivas", según la corte.