MADRID, 11 Oct. (EUROPA PRESS) -
Los equipos de rescate de Guatemala han recuperado ocho nuevos cadáveres en la zona donde la semana pasada tuvo lugar un deslave de tierra que dejó sepultadas numerosas viviendas en El Cambray II, en el sur del país, por lo que el balance total de víctimas mortales asciende a 271 hasta este domingo, cuando cerraron las operaciones de rescate.
Según ha informado el diario 'Presa Libre', el alcalde de Santa Catarina Pinula, Víctor Alvarizaes, aseguró que con datos del registro catastral y otros informes, los desaparecidos son entre 30 y 40 personas, y no los 300 que se dijeron en un principio.
Alvarizaes explicó además que "se especuló demasiado" al comienzo de los trabajos de búsqueda, afirmando a su vez que son pocas las personas que faltan por ser encontradas.
Esto hace que el número de desaparecidos se ponga en duda, pues el miembro de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred), Sergio Cabañas, explicó que los datos que se dieron al principio de las operaciones estaban basados en un estándar internacional que promedia seis personas por vivienda.
El accidente tuvo lugar a última hora del pasado jueves por la crecida del río Pinula, causada a su vez por las intensas precipitaciones, que terminaron de abrir una grieta preexistente en la montaña en cuyas faldas se asienta El Cambray II.
El alud enterró por completo un centenar de viviendas en las que vivían unas 40 familias. El desastre natural sorprendió de noche a los habitantes de esta localidad guatemalteca, por lo que la mayoría de sus vecinos estaban durmiendo en sus casas.
Expertos han señalado que podría producirse otro deslave como este, ya que las últimas imágenes captadas por satélite muestran una grieta similar a la que provocó el desprendimiento de terreno.
La zona ya había sido declarada de alto riesgo por la Conred debido al desgaste del terreno en estos años, lo que ha dado lugar a una investigación de la Fiscalía para dilucidar si hay responsabilidad penal por negligencia.
Según la Conred, los residentes en El Cambray I y II fueron avisados en 2008 de que podría producirse una catástrofe natural de estas características, pero que seguían viviendo ahí porque "se hace prácticamente imposible trasladar a más de 35.000 personas a otro sitio".
EVACUAN A 40 FAMILIAS POR RIESGO DE NUEVO ALUD
Este sábado, 40 familias fueron evacuadas por las autoridades guatemaltecas después de que se advirtiera el riesgo de un nuevo derrumbamiento de tierra.
Por el momento, la escuela local da cobijo a unas 400 personas, a la espera de que el Gobierno, tal y como ha prometido, construya viviendas para las familias afectadas.
El Congreso de Guatemala ha aprobado también una partida de unos 2,6 millones de dólares para ayudar a las víctimas, sin embargo, hasta que no concluyan los procesos de rescate, no se conocerá la magnitud de la catástrofe.