MADRID, 31 Ene. (EUROPA PRESS) -
El balance de muertos a causa del derrumbe el lunes de una presa minera en la localidad brasileña de Brumadinho, en Minas Gerais (sureste), ha aumentado a 110, según han confirmado este jueves las autoridades del país sudamericano.
Los Bomberos han señalado que un total de 71 cuerpos han sido identificados, mientras que Defensa Civil ha cifrado en 238 los desaparecidos, tal y como ha recogido el diario brasileño 'Folha de Sao Paulo'.
Las autoridades de Brasil han congelado durante la jornada más de 800 millones de reales (cerca de 191 millones de euros) en fondos de la empresa Vale como compensación para las víctimas de la rotura de la presa.
Durante la jornada del martes, tres empleados de Vale SA y otros dos ingenieros que trabajaban en representación de la minera brasileña fueron arrestados, según informaron fiscales de los estados de Minas Gerais y Sao Paulo.
En un comunicado publicado en Twitter, Vale ha señalado que está cooperando con las autoridades, que investigan el colapso de una presa que podría haber dejado más de 300 muertos.
La tragedia ha generado una ira generalizada en Brasil y nuevas dudas sobre el compromiso de Vale con la seguridad después de un incidente similar ocurrido hace tres años en un yacimiento del que era copropietario.
Entre los arrestados están dos de los gerentes de Vale en la mina Corrego do Feijao --donde se fracturó un dique de residuos el viernes pasado, arrasando la localidad de Brumadinho con desechos mineros--, según el texto judicial, al que ha tenido acceso Reuters. Otros dos ingenieros han sido arrestados en Sao Paulo, según fiscales de ese estado.
Las autoridades del estado de Minas Gerais han emitido un total de cinco órdenes de arresto y siete de allanamiento, por presunto asesinato, falsificación de documentos y delitos ambientales, según los documentos judiciales.
Más tarde, la Vale SA ha anunciado que cerrará hasta el 10 por ciento de su producción al desmantelar 19 presas como la que colapsó la semana pasada, según ha recogido la agencia de noticias Reuters.
El presidente ejecutivo de la empresa, Fabio Schvartsman, ha afirmado que Vale detendrá las operaciones que usan esas presas y que gastará unos 5.000 millones de reales (alrededor de 1.136 millones de euros) en su desmantelamiento en los próximos tres años.