EEUU califica los ataques como "un asalto a la soberanía de Irak y su pueblo"
MADRID, 29 Sep. (EUROPA PRESS) -
Al menos 13 personas han muerto y 58 han resultado heridas este miércoles en una serie de ataques con misiles y drones perpetrados por la Guardia Revolucionaria de Irán contra el Kurdistán iraquí, según han confirmado las autoridades de esta región semiautónoma.
La Fundación Antiterrorista en la región del Kurdistán iraquí ha detallado que más de 70 misiles balísticos 'Fateh' y drones han sido lanzados desde el interior del territorio iraní hacia la región semiautónoma iraquí, todo ello en cuatro etapas, según ha recogido el portal de noticias Shafaq.
Entre los muertos se encuentra una mujer embarazada, mientras que entre los heridos se incluyen una amplia mayoría de civiles, incluidos niños menores de diez años, estudiantes, profesores y periodistas.
Según las informaciones recogidas por la cadena de televisión kurda Rudaw, los ataques han alcanzado sedes del Partido para la Libertad del Kurdistán (PAK), el Partido Democrático del Kurdistán de Irán (PDKI), el Partido por una Vida Libre para el Kurdistán (PJAK) y Komala en las provincias de Suleimani y Erbil.
La Guardia Revolucionaria iraní ha dicho que ha atacado "posiciones de grupos terroristas" con "misiles de precisión" y drones, sin pronunciarse sobre posibles muertos, tal y como ha recogido la agencia iraní de noticias Tasnim. La jornada es la quinta consecutiva de ataques contra objetivos en el Kurdistán iraquí.
Por su parte, el jefe del PAK, Husein Yazdanpaná, ha confirmado que la formación ha sufrido "múltiples" bajas en un bombardeo contra su base en Sheraua, cerca de Pirde, mientras que el PDKI ha denunciado un ataque contra su sede en Koya.
Asimismo, Mohamed Salí Qaderi, un alto cargo del partido, ha subrayado que en el campamento "hay mujeres y niños" y ha agregado que también hay varias bases de grupos kurdo-iraníes en los alrededores.
Este mismo miércoles, el Ministerio de Exteriores de Irak ha anunciado que convocará al embajador de Irán en el país para protestar por el "continuo bombardeo de áreas en la región del Kurdistán". En declaraciones a la agencia de noticias iraquí INA, el portavoz del Ministerio, Ahmad al Sahaf, ha señalado que el embajador "será convocado de forma urgente para recibir una nota de protesta".
Poco antes del anuncio, la cartera de Exteriores iraquí ha condenado los ataques con misiles y artillería perpetrados por las fuerzas iraníes y ha alertado con activar la "respuesta diplomática de más alto nivel".
Otro de los que se ha pronunciado ante los ataques ha sido el asesor de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Jake Sullivan, quien ha mostrado su apoyo a los líderes de Irak en la región y ha condenado los sucesos como "un asalto a la soberanía de Irak y su pueblo".
"Los líderes iraníes continúan demostrando un flagrante desprecio no solo por la vida de su propio pueblo, sino también por la de sus vecinos y los principios fundamentales de soberanía e integridad territorial consagrados en la Carta de la ONU", ha dicho.
En este sentido, ha explicado que la parte iraní utiliza estos ataques para desviar la atención de sus problemas internos. "Su provisión de drones a Rusia para su guerra de agresión en Ucrania y a sus representantes en toda la región de Oriente Próximo, deben ser condenados universalmente", ha subrayado.
El PDKI reivindica la creación de una entidad kurda en Irán, algo a lo que se ha negado la República Islámica. Combatientes del PDKI y la Guardia Revolucionaria se enfrentaron en 2015 en el norte de Irán, dejando varios muertos y heridos en ambos bandos.
Por su parte, el secretario de Komala, Abdulá Muhtedi, ha condenado los ataques iraníes y ha resaltado que la ofensa "unirá a los partidos" y a los kurdos iraníes "contra la República Islámica". "Pedimos a Occidente y Estados Unidos que ponga fin a la agresión iraní", ha zanjado.
Las autoridades iraníes han acusado a grupos opositores kurdos de azuzar las recientes protestas en el país por la muerte de Mahsa Amini, una joven de 22 años de la minoría kurda muerta bajo custodia tras ser detenida en Teherán por supuestamente llevar mal puesto el velo.
Irán tiene unos siete millones de kurdos, lo que representa cerca de un diez por ciento de su población. La mayoría viven en la región de Kurdistán, situada en el noroeste del país, junto a la frontera con Irak.