Ashton llama a la "contención" y subraya que "la solución solamente puede ser política"

BRUSELAS 3 Jul. (EUROPA PRESS) -

La Alta Representante de Política Exterior y de Seguridad Común de la Unión Europea (UE), Catherine Ashton, ha expresado su "profunda preocupación" por la situación en Egipto y ha instado a todas las partes a "mostrar contención", subrayando que "la solución solamente puede ser política".

"Estoy siguiendo la situación en Egipto muy de cerca y con profunda preocupación", ha dicho, en un comunicado. En concreto, ha apuntado a los "casos de abusos sexuales entre las manifestantes", a pesar de que "la mayoría de las manifestaciones se han llevado a cabo de forma pacífica".

En este contexto, la funcionaria comunitaria ha instado "a todas las partes a mostrar contención" y ha reiterado su llamamiento a "respetar los principios de manifestación pacífica y no violencia".

"La confrontación no puede ser la solución. La única solución al actual 'impasse' puede ser política, sobre la base del diálogo sustancial e inclusivo deseado por el pueblo egipcio y fundado en los principios democráticos y en el respeto a los derechos fundamentales", ha señalado.

Ashton también ha subrayado "el firme compromiso de la UE de permanecer al lado del pueblo egipcio en su esfuerzo hacia la transición democrática", al tiempo que ha ofrecido el apoyo de la UE "para asistir a todas las fuerzas políticas en la búsqueda de una solución pacífica".

Finalmente, la Alta Representante ha expresado sus "profundas condolencias" a las familias de los fallecidos durante las protestas y ha deseado una pronta recuperación a los heridos.

El jefe del Ejército, Abdel Fatá El Sisi, dio el pasado lunes un ultimátum de 48 horas a la clase política de Egipto para que aborde las demandas populares, advirtiendo de que, de lo contrario, implementará su propia 'hoja de ruta'.

Según ha podido saber Reuters, la 'hoja de ruta' del Ejército prevé la suspensión de la Constitución y la disolución del Parlamento, que lideran los islamistas, así como la creación de un gobierno de tecnócratas que asuma las riendas del país hasta que la Carta Magna sea enmendada, para después celebrar elecciones presidenciales.

En respuesta, el presidente egipcio, Mohamed Mursi, ha aclarado que no dimitirá, sino que "se aferrará a la legitimidad" que le da haber sido elegido en unas elecciones "libres" y que la Constitución sobre la que se asienta su mandato fuera aprobada en referéndum.

El líder islamista también ha advertido de que protegerá "la legitimidad" con su "vida". "Seré firme con toda aquella persona que provoque el derramamiento de sangre", ha subrayado. "No dejéis que se os robe la revolución", ha instado.