MADRID 15 Mar. (EUROPA PRESS) -
El fundador de Wikileaks, Julian Assange, ha reconocido que los mil días que ha pasado encerrado en la Embajada ecuatoriana en Londres han sido "difíciles" aunque ha valorado de forma positiva que durante este tiempo se ha creado una mayor "conciencia" sobe la situación "injusta" que a su juicio está viviendo.
"Han sido mil días difíciles. No tanto para mí como para mi familia", ha relatado Assange en una entrevista a TeleSur, en la que ha valorado cómo ha cambiado la situación legal y política desde junio de 2012.
"La situación se ha aclarado y se ha convertido en una injusticia obvia y notoria", ha valorado el fundador de Wikileaks, sobre el que pesa una orden de extradición a Suecia por dos denuncias de acoso sexual y violación.
Respecto a la situación con Estados Unidos, que pretende juzgar a Assange por la filtración masiva de documentos oficiales a Wikileaks, ha afirmado que pese a que existe una "retórica hostil" en su contra, considera que cuenta con el apoyo de algunos sectores.
"Han pedido mi asesinato, han pedido que Wikileaks sea incluida en la lista de organizaciones terroristas, han pedido definirme a mi y a mi personal como enemigos combatientes", ha recordado Assange, de 43 años.
Pese a estos factores, Assange ha considerado que algunos medios le han tratado de forma "justa", aunque la mayoría son pequeños. "Tenemos un espectro de apoyo que no siempre puede expresarse, aunque a veces lo hace y creo que es un signo esperanzador", ha afirmado.
En cuanto a Reino Unido, Assange ha valorado que como consecuencia de su situación legal, el Gobierno británico haya modificado la ley para recoger que no se pueden producir extradiciones sin que exista una acusación formal.
"No puedes tener a alguien detenido en Europa sin cargos durante cuatro años y medio. Todo el mundo puede ver que hay algo raro en esto", ha asegurado el fundador de Wikileaks.