ADÉN, 9 Dic. (Reuters/EP) -
Varios hombres desconocidos han atacado este miércoles una iglesia católica abandonada en la ciudad portuaria yemení de Adén, según han informado los habitantes del lugar, tres días después de que milicianos del grupo terrorista Estado Islámico asesinaran al gobernador de la ciudad.
El Gobierno de Yemen tiene su base en Adén pero trata de imponer su autoridad en el país desde que su Ejército, respaldado por las tropas del golfo Pérsico, expulsaran a los combatientes huthi, que controlan la capital, Saná, y que cuentan con el apoyo de Irán.
Los milicianos islamistas han llevado a cabo frecuentes ataques, han ocupado edificios gubernamentales y, ocasionalmente, se han desplegado en las calles sin ningún tipo de obstáculo. Cerca de 6.000 personas han muerto desde la intervención de la coalición liderada por Riad en la guerra civil de Yemen en marzo.
"Los hombres armados, que probablemente eran extremistas, hicieron estallar la iglesia católica en el distrito de Mualla, en Adén", ha informado un residente a Reuters. "Hemos oído una explosión muy fuerte que ha causado una gran nube de humo en el aire y después hemos visto el edifico completamente destrozado", ha añadido.
La Iglesia de la Inmaculada Concepción fue construida durante la época colonial británica en la década de los 60 y ya había sido fuertemente dañada tras el ataque aéreo de la coalición liderada por Arabia Saudí en mayo, según un comunicado de la Iglesia Católica de ese momento.
El grupo huthi asegura que inició una revolución contra el Gobierno corrupto del presidente, Abd-Rabbu Mansour Hadi, pero el Ejecutivo y sus aliados del Golfo han asegurado que fue un golpe de Estado y que están aumentando la influencia de Irán en el mundo árabe.
Adén, que una vez fue una ciudad cosmopolita que albergaba prósperas comunidades cristianas e hindúes, ha pasado de ser uno de los puertos más importantes del imperio británico a un gran remanso sin ley.
Su pequeña comunidad cristiana se fue hace tiempo. Asaltantes desconocidos ya habían atacado el cementerio cristiano y habían quemado otra iglesia de Adén este año.
La organización yihadista Estado Islámico asumió la responsabilidad del ataque del pasado domingo que le costó la vida al gobernador de la provincia yemení de Adén, Jaafar Mohamed Saad. Su sustituto, Aidarus al Zubaidi, se ha comprometido a "limpiar Adén de los causantes del caos".
"No permitiremos que el caos ni el vacío en la seguridad permita a estos elementos continuar con sus crímenes en Adén", ha declarado Al Zubaidi a través de la televisión estatal.