El ataque contra el consulado en Benghazi fue un "ataque terrorista"

Actualizado: jueves, 20 septiembre 2012 10:25

WASHINGTON, 20 Sep. (Reuters/EP) -

El ataque perpetrado el pasado 11 de septiembre contra el consulado estadounidense en la ciudad de Benghazi, ubicada en el este de Libia, fue un "ataque terrorista", según ha informado el director del Centro Nacional Antiterrorista, Matthew Olsen.

En una comparecencia ante el Senado, Olsen ha aseverado que se trata de un "ataque terrorista", en el que podría estar implicada Al Qaeda, aunque ha subrayado que, de momento, no hay confirmación de este extremo.

"Al parecer, participaron elementos diferentes, sin que necesariamente sea propuesta de uno u otro. Estamos investigando las posibles conexiones con Al Qaeda, en concreto, con su rama en el Magreb Islámico (AQMI)", ha explicado.

Así, ha insistido en que, la hipótesis actual indica que "fue un ataque oportunista que surgió y se desarrolló durante varias horas". "En este momento, no tenemos información específica de los servicios de Inteligencia que apunte a que hubo una planificación y una coordinación significativas", ha dicho.

En cualquier caso, ha indicado Olsen, había milicianos bien armados, muestra de ello es que se llegaron a lanzar granadas propulsadas por cohetes y fuego de mortero contra la representación estadounidense.

Por su parte, la senadora republicana Susan Collins se ha mostrado segura de que fue un ataque premeditado con motivo del undécimo aniversario de los atentados del 11-S, al tiempo que ha expresado su preocupación por la seguridad del consulado, ya que la respuesta al ataque quedó en manos de las fuerzas libias.

El ataque se saldó con la muerte del embajador estadounidense en Libia, Christopher Stevens, los ex miembros de las fuerzas de élite Tyrone Woods y Glen Doherty, y el experto en tecnologías de la información Sean Smith.

La causa del ataque a la misión del país norteamericano fue la película 'La inocencia de los musulmanes', de producción estadounidense y egipcia, que hace una parodia del profeta Mahoma, figura sagrada para el Islam.

Desde que la cinta viera la luz, miles de musulmanes se han manifestado en hasta 32 países para protestar por lo que consideran una blasfemia. Los incidentes más graves se han vivido en Yemen, con cuatro muertos y 44 heridos; Sudán, con tres muertos; Egipto, con un muerto y cientos de heridos y detenidos; y Líbano, con un muerto.