Ataques atribuidos a los paramilitares sudaneses dejan 73 muertos entre los desplazados de Zamzam desde inicio de mes

MADRID 14 Dic. (EUROPA PRESS) -

Bombardeos atribuidos a la organización paramilitar sudanesa de las Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF) han dejado al menos 73 muertos y 458 heridos desde principios de mes en el campamento de desplazados de Zamzam, en el estado de Darfur Norte (en el oeste de Sudán) y el único lugar del mundo bajo estado de hambruna declarado por Naciones Unidas.

Zamzam, donde sobreviven cientos de miles de personas que han escapado de la guerra de Sudán, lleva meses siendo objeto de ataques paramilitares en el marco de su guerra contra el Ejército sudanés, un conflicto que ha terminado de devastar por completo el país en un año y medio.

El balance ha sido proporcionado por el director general del Ministerio de Salud del estado, Ibrahim Khater, quien ha detallado que 57 personas, entre ellas 15 niños, han muerto durante el periodo del 3 al 11 de diciembre y que otras 16 murieronn en un bombardeo efectuado el pasado jueves, según declaraciones recogidas por el 'Sudan Tribune'.

La ONG especializada en el seguimiento de conflictos armados ACLED estima que la guerra de Sudán desatada el 15 de abril del año pasado ha dejado ya unos 13.000 muertos en todo el país a lo largo de 2024, entre ellos unos 4.200 civiles, según una estimación muy conservadora por la falta de información sobre las víctimas por conflicto en el país africano.

El Proyecto de Datos de Localización de Conflictos Armados estima que la guerra ha dejado al menos 13.201 fallecidos en más de 4.800 incidentes violentos repartidos por el país, especialmente en la región de Jartum, el primer epicentro de los combates entre el Ejército sudanés y las RSF.

Por poner un ejemplo de la dificultad a la hora de cifrar los muertos en la guerra, un reciente informe de la Escuela de Higiene y Medicina Tropical de Londres estimaba que 61.000 personas han muerto solo en Jartum desde que comenzó la guerra en abril de 2023 hasta junio de 2024.

De ellas, 26.000 personas habrían fallecido como resultado directo de la violencia y el resto por la crisis humanitaria asociada, de acuerdo con el informe, donde se apunta, como hace ACLED que estas estimaciones son las mínimas atribuibles y no hay forma de verificarlas.