MADRID 14 Nov. (EUROPA PRESS) -
El atentado suicida perpetrado el viernes el la base aérea de Bagram, que se saldó con la muerte de dos soldados y dos contratistas estadounidenses, habría sido ejecutado por un antiguo talibán que trabajaba en las instalaciones.
El gobernador del distrito de Bagram, Abdul Shokor Qudosi, ha dicho, en declaraciones a la cadena de televisión británica BBC, que el suicida era Qari Enyatulá, quien se unió al proceso de paz en 2008.
La vivienda de Enyatulá ha sido registrada en las últimas horas y dos de sus familiares han sido detenidos, en el marco de las investigaciones sobre el atentado.
El secretario de Defensa de Estados Unidos, Ash Carter, confirmó el sábado la muerte de cuatro estadounidenses en el ataque, agregando que otras 18 personas resultaron heridas, entre ellas 16 soldados.
El ataque en la base, la mayor de que dispone Estados Unidos en suelo afgano, tuvo lugar apenas un día después de que un ataque contra un consulado alemán en la ciudad de Mazar-i-Sharif dejara seis muertos y cerca de 120 heridos.
Tanto el ataque de este sábado como el del día anterior han sido reivindicados por los talibán, tal y como ha confirmado el portavoz del grupo insurgente, Zabihulá Muyahid.
Los talibán aseguraron tras el ataque al consulado alemán que se trataba de una represalia por los bombardeos realizados la semana pasada por la OTAN en los alrededores de Kunduz, en los que murieron al menos 30 civiles.
El bombardeo fue denunciado por las autoridades locales, y los talibán aseguraron que las fuerzas internacionales participaban en una operación cuando se vieron sorprendidas por fuego enemigo, muriendo tres soldados afganos y dos estadounidenses. Poco después se produjo el bombardeo en el lugar.
La Misión de Asistencia de Naciones Unidas en Afganistán (UNAMA) ya ha informado de la apertura de una investigación sobre lo ocurrido, al igual que ha hecho la OTAN.