Rohani dice que los iraníes tienen derecho a criticar pero no se tolerará a quienes alteren el orden público
DUBAI, 1 Ene. (Reuters/EP) -
Dos personas más han muerto por disparos en las protestas que desde el jueves pasado se vienen registrando en distintas ciudades de Irán, las peores desde las ocurridas en 2009, mientras los mensajes en las redes sociales han llamado a seguir con las manifestaciones antigubernamentales este lunes. Estas muertes elevan a cuatro los fallecidos hasta la fecha.
Las dos nuevas víctimas se produjeron el domingo en la localidad de Izeh, en el suroeste del país, y varias personas más resultaron heridas, según ha informado la agencia ILNA, citando al diputado local Hedayatolá Jademi.
"No sé si los disparos de ayer fueron realizados por participantes en la marcha o por la Policía y esta cuestión está siendo investigada", ha indicado Jademi.
Mensajes publicados en las redes sociales han llamado a los iraníes a marchar en Teherán y otros 50 núcleos urbanos, muchos de los cuales han venido registrando protestas en los últimos cuatro días, desde que estas comenzaron en Mashhad, la segunda ciudad del país. Inicialmente, los manifestantes se quejaban de la subida de los precios pero las protestas han degenerado en reivindicaciones políticas.
MENSAJE DE ROHANI
De hecho, han continuado durante la noche pese a que el presidente iraní, Hasan Rohani, hizo un llamamiento este domingo a la calma. Según dijo, los iraníes tienen derecho a criticar a las autoridades pero advirtió de que los disturbios serán reprimidos.
"El Gobierno no mostrará tolerancia hacia aquellos que provoquen daños en propiedades públicas, violen el orden público y creen disturbios en la sociedad", advirtió Rohani en un discurso televisado.
Decenas de miles de personas se han manifestado en todo el país contra el Gobierno y la elite clerical iraní, lo que ha provocado advertencias por parte de las autoridades de una dura represión.
Hasta ahora, las fuerzas de seguridad han mostrado contención, con la esperanza de evitar una escalada de la crisis provocada inicialmente por la mala situación económica del país y la corrupción. Sin embargo, la ira pronto se volvió contra el clero en el poder desde la Revolución de 1979.
De hecho, se han proferido consignas contra el líder supremo de la Revolución, Alí Jamenei. Así, en algunas de las protestas se ha gritado "abajo el dictador" o "Jamenei, avergüénzate, deja al país solo".
Durante la jornada del domingo, hubo protestas en Teherán, donde la Policía empleó cañones de agua para dispersar a los manifestantes en el centro de la capital, así como en Shahib Shahr (centro), donde se produjeron disturbios y los manifestantes prendieron fuego a un vehículo policial. Los iraníes también se manifestaron en Sanandaj y Kermanshá, en el oeste; en Chabahar, en el sureste, y en Ilam e Izeh, en el suroeste.
La ola de protestas es la mayor registrada en Irán desde la vivida en 2009 tras las disputadas elecciones presidenciales en las que fue reelegido el entonces presidente Mahmud Ahmadineyad.
Para tratar de contener la situación, el Gobierno iraní ha anunciado que se restringirán temporalmente el acceso a Telegram e Instagram, propiedad de Facebook, mientras que hay algunas informaciones que apuntan a que el acceso móvil a Internet está siendo bloqueado en algunas zonas.
REACCIÓN INTERNACIONAL A LAS PROTESTAS
Precisamente, este bloqueo de las redes sociales ha sido criticado por el presidente estadounidense, Donald Trump, este domingo. "Irán, el Estado número uno en patrocinar el terrorismo donde se producen cada hora numerosas violaciones de los Derechos Humanos, ha cerrado ahora Internet para que los manifestantes pacíficos no puedan comunicarse. ¡Eso no es bueno!", ha defendido Trump en un mensaje en Twitter.
Por su parte, defendió en un comunicado posterior que las "voces (de los iraníes) merecen ser escuchadas". "Animamos a todas las partes a proteger este derecho fundamental a la expresión pacífica y a evitar cualquier acción que contribuya a la censura", sostuvo.
El ministro de Exteriores británico, Boris Johnson, también se ha pronunciado vía Twitter, asegurando que "sigue los acontecimientos en Irán con preocupación". "Es vital que los ciudadanos tengan el derecho de manifestarse pacíficamente", defendió este domingo.
200 DETENIDOS EN TEHERÁN EL SÁBADO
Según el vicegobernador de Teherán, Alí Asghar Naserbakht, 200 manifestantes fueron detenidos solo el sábado, según la agencia ILNA. El fiscal de la capital, Abbas Jafari Dolatabadi, ha indicado que algunos de ellos han confesado que "se dejaron llevar por las emociones y prendieron fuego a mezquitas y edificios públicos", precisando que se enfrentarán a un duro castigo.
La Policía y los Guardianes de la Revolución han aplastado en el pasado con violencia las manifestaciones, si bien en esta ocasión lo que está sucediendo podría provocar mayor preocupación entre las autoridades, puesto que se trata de protestas espontáneas y que carecen de un líder claro.
En una aparente respuesta a las propuestas, el Gobierno ha dado marcha atrás en sus planes de subir los precios de los combustibles, ha prometido incrementar las entregas de dinero a los pobres y crear más empleos en los próximos años. El paro juvenil alcanzó el 28,8 por ciento en 2017.
"Predecimos que se crearán al menos 830.000 empleos en el nuevo año", dijo el sábado el portavoz gubernamental, Mohamad Baqer Nobajt, en la televisión estatal, sin ofrecer más detalles.