SÍDNEY, 23 Oct. (Reuters/EP) -
El Gobierno de Australia ha aplaudido este viernes el compromiso de Papúa Nueva Guinea con el reasentamiento de solicitantes de asilo de un centro de detención de inmigrantes australiano, a pesar de las dudas sobre si se garantizará su seguridad en una de los países más peligrosos de la región.
El ministro de Inmigración de Australia, Peter Dutton, ha felicitado a Papúa Nueva Guinea, después de que el país no haya reasentado a nadie en los tres años que lleva acogiendo el centro de detención.
"El Gobierno de Papúa Nueva Guinea ha mostrado con este anuncio su compromiso para permitir a los refugiados que continúen sus vidas y tengan un nuevo inicio en esta dinámica nación con una economía creciente", ha añadido.
Papúa Nueva Guinea hace frente a un elevado nivel de violencia y pobreza, y el propio Gobierno australiano pide a sus ciudadanos que "muestren un grado elevado de precaución" durante sus visitas al país debido a "los altos niveles de criminalidad".
Los secuestros, las violaciones en grupo y "un ambiente generalizado de anarquía" deben ser tomados en cuenta antes de viajar al país, recalca el Gobierno australiano en su página web.
Los solicitantes de asilo son un tema de debate en Australia, y numerosos gobiernos han prometido evitar que lleguen al territorio nacional, enviando a los interceptados en barcas a campamentos de la isla de Manus, en Papúa Nueva Guinea, y Nauru.
Sin embargo, Australia no ha logrado una solución permanente para los solicitantes de asilo. El acuerdo alcanzado el año pasado con Camboya para reasentarles ha registrado problemas, y muchos de ellos han denunciado agresiones.