MADRID, 2 Sep. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno australiano ha aumentado el cupo máximo de inmigrantes que puede recibir el país en un intento de abordar la falta de trabajadores que ha supuesto una crisis laboral en el Estado oceánico.
Así lo ha anunciado la ministra del Interior australiana, Clare O'Neil, que ha detallado que 195.000 personas podrán ingresar al país cada año, 35.000 personas más que la cifra estipulada anteriormente, según ha recogido 'The Sydney Morning Herald'.
"La escasez de habilidades en nuestro país es real. Y este no es un problema que afecte solo a las empresas y organizaciones, es un problema que afecta la vida cotidiana de todos los australianos", ha explicado O'Neil, que ha apostado por una reforma del sistema de inmigración para resolver el problema.
En este sentido, el Ejecutivo australiano ha anunciado la dotación de más de 23 millones de euros al Ministerio de Inmigración para acabar para eliminar la acumulación de solicitudes de visa pendientes que tiene el país.
De esta manera, la capacidad del personal aumentará en 500 puestos durante los próximos nueve meses, lo que permitiría avanzar en las casi 900.000 visas pendientes de revisión, según los datos recogidos por el citado diario.
Estas medidas se enmarcan en un contexto en el que las empresas del país encuentran serias dificultades para encontrar mano de obra después de dos años sin migración, puesto que Australia cerró sus fronteras a causa de la pandemia de la COVID-19.