SÍDNEY, 1 Nov. (Reuters/EP) -
El Alto Comisionado de Australia para Reino Unido, George Brandis, ha informado de que Australia retirará a los niños refugiados de los centros de detención del Pacífico en unas semanas, mientras el primer ministro australiano, Scott Morrison, busca asegurar el apoyo de su gobierno, que parece que se convertirá en una administración minoritaria.
La política de inmigración de Canberra hace que los solicitantes de asilo sean interceptados en el mar tratando de llegar a Australia y enviados a los centros de detención en Papúa Nueva Guinea y en la isla de Nauru, en el sur del Pacífico.
Mientras las agencias humanitarias han pedido el traslado de los más de 1.000 refugiados retenidos durante más de cinco años, Morrison está bajo una presión para reasentar a 40 niños que se encuentran actualmente en Nauru.
"Casi no hay niños en Nauru y en Papúa Nueva Guinea y esperamos que para finales de este año no haya ninguno", ha afirmado Brandis a la emisora británica LBC.
Con el traslado de los niños refugiados, Morrison atenderá una solicitud clave de varios legisladores para que apoyen a su gobierno.