MADRID, 29 DE ABRIL (EDIZIONES)
Las autoridades británicas creen que el incidente del Airbus A320 de British Airways del pasado 17 de abril en Heathrow pudo no haber sido con un avión no tripulado. Así lo declaró el Secretario Transporte, Patrick McLoughlin, el jueves al parlamento tras consultarlo con expertos en la materia, según informa The Guardian.
El avión aterrizó sin problema alguno en el aeropuerto, y pasó a continuación una revisión e investigación para poder despegar en su próximo vuelo. La investigación iniciada por la Rama de Investigación de Accidentes Aéreos (AAIB) se ha cerrado debido a la falta de pruebas. Un portavoz de la AAIB ha declarado: “Hemos hecho investigaciones iniciales, pero no había suficiente información para saber qué objeto estaba implicado y poder ir más lejos en la investigación.”
La policía, al verse con poca información, apeló a cualquier persona que pudiera informarles sobre algo de este asunto, y aunque registraron una amplia zona al suroeste de Londres en busca de alguna pista, no hallaron nada.
El Ministro de Transporte, Robert Goodwill, no confirmó en la subcomisión de mercado interno de la Unión Europea que el Airbus A320 fuera alcanzado por un dron. “No hubo ningún daño real del avión y en efecto, hay una cierta especulación con que puede haber sido incluso una bolsa de plástico o algo así. El piloto tiene un montón de otras cosas para concentrarse en el aterrizaje, así que no estamos muy seguros de lo que vieron”.
De haber sido un choque con un dron, no hubiera sido el primer caso. Un informe elaborado en marzo de este año por la UK Airprox Board afirma haber encontrado 23 incidentes de este tipo entre los meses de abril y octubre del año pasado.
Las autoridades civiles han recordado que los aviones no tripulados nunca deben exceder de una altura de 122 metros, y si porta una cámara, no debe volarse a 50 metros de personas, vehículos o edificios, así como en eventos deportivos o conciertos.