Edificios destruidos por un bombardeo de Israel contra el campamento de refugiados de Yabalia, el más grande de la Franja de Gaza - Fadi Wael Alwhidi/dpa
Acusan al Gobierno israelí de "piratear" parte de los fondos, recaudados en su nombre en línea con los Acuerdos de Oslo
MADRID, 8 Nov. (EUROPA PRESS) -
Las autoridades palestinas han rechazado este miércoles la posibilidad de aceptar los fondos recaudados en su nombre por parte de Israel debido a las exigencias sobre que parte de los fondos no sean entregados a la Franja de Gaza, escenario de una ofensiva militar de Israel tras los ataques ejecutados el 7 de octubre por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás).
"La cúpula palestina rechaza recibir los fondos después de que Israel haya pirateado cientos de millones de shekels e impuesto condiciones para que no haya pagos a la Franja de Gaza", ha dicho el secretario del Comité Ejecutivo de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), Husein al Sheij, a través de su cuenta en la red social X.
Así, ha insistido en que "la unidad de la tierra y el pueblo es una decisión palestina no negociable" y ha agregado que "los aspectos relativos al gasto de los presupuestos de la Autoridad Palestina son decididos por el Gobierno palestino". "Compartiremos lo que haya con nuestro pueblo en la querida Franja, incluso si es un dirham", ha zanjado.
El ministro de Finanzas de Israel, Bezalel Smotrich, dio orden a finales de octubre de congelar los fondos entregados a la Autoridad Palestina por su "apoyo" a los ataques ejecutados por Hamás, que dejaron cerca de 1.400 muertos y más de 240 secuestrados.
De esta forma, reclamó que el Gobierno celebre un debate sobre la transferencia de estos fondos, recaudados en nombre de la Autoridad Palestina, tal y como recogen los Acuerdos de Oslo --firmados en 1993-- ante "el apoyo de altos cargos de la Autoridad palestina a las horribles masacres de la organización terrorista nazi Hamás".
Las autoridades de Israel recaudan estos fondos en nombre de la Autoridad Palestina y los transfieren de forma mensual, una vez descontados los gastos derivados de servicios como la electricidad y el agua. En los últimos años, estas entregas han sido congeladas en varias ocasiones ante las tensiones en el marco del conflicto palestino-israelí.