MADRID, 27 Ago. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno británico habría desplegado varios aviones en una base militar ubicada en Chipre, a menos de 200 kilómetros de Siria, en medio de las tensiones derivadas de las acusaciones contra el Ejército sirio de haber usado armamento químico en el marco de la guerra civil que atraviesa el país, que ha provocado que varios países hayan elevado el tono de sus críticas y hayan comenzado a valorar una acción militar contra Siria.
Testigos citados por el diario británico 'The Guardian' han afirmado haber visto varios aviones de transporte C-130 y aviones de combate en la isla europea. Asimismo, residentes de la zona cercana a la base aérea en el país han dicho que la actividad en la zona ha sido mucho mayor de lo habitual en las últimas 48 horas.
El diario ha indicado que, en caso de que Reino Unido decida participar en una operación militar contra Siria, es probable que Chipre sea una de las bases utilizadas para la misma. Este mismo lunes, el ministro de Exteriores de Reino Unido, William Hague, ha declarado que es posible que se produzca una respuesta a pesar de que no exista un respaldo unánime por parte del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas.
Durante la jornada, inspectores de la ONU han visitado el suburbio de Muadamiya, en el suroeste de Damasco, donde murieron decenas de personas la semana pasada en el supuesto ataque con armas químicas por parte del Gobierno.
Tanto Reino Unido como Estados Unidos han dejado claro que consideran que el acceso al equipo de expertos se produce demasiado tarde y que el Gobierno sirio ha sido el responsable del ataque.
"Hay que ser realistas a la hora de esperar los resultados de la investigación de la misión de la ONU", ha declarado Hague. "El hecho es que gran parte de las pruebas podrían haber sido destruidas a estas alturas por el fuego de artillería", ha indicado.
Estados Unidos, Reino Unidos y sus aliados podrían esperar a que el equipo investigador de Naciones Unidas termine su informe y abandone el país antes de optar por la vía militar contra el país. Expertos militares citados por 'The Guardian' han resaltado que, en caso de que se produzca un ataque, lo probable es que su objetivo sea evitar futuros bombardeos con armamento químico.
Por ello, han argumentado que los ataques podrían centrarse en las unidades de élite en las que se basa el Ejército, especialmente la Cuarta División Blindada y la Guardia Republicana. Aún está por definir si la campaña se limitaría a ataques concretos o si se trataría de una operación a gran escala.
Pese a que Washington ha indicado que sólo emprenderá acciones en Siria en concertación con la comunidad internacional y con una justificación legal, Reino Unido y Turquía han mostrado su disposición a lanzar la operación sin el respaldo del Consejo de Seguridad, donde Rusia y China, aliados de Damasco, han vetado anteriores resoluciones de condena.
El presidente de Rusia, Vladimir Putin, ha insistido este mismo lunes en que no hay pruebas del ataque químico atribuido al Gobierno de Bashar al Assad. Así, ha asegurado que "no hay pruebas de que se haya usado armamento químico ni de quién fue el responsable".