Pide al Gobierno de Lukashenko que entable "un diálogo transparente e inclusivo"
MADRID, 18 Sep. (EUROPA PRESS) -
La Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, ha denunciado la continuación de la represión y las torturas en Bielorrusia frente a las manifestaciones contra la reelección del presidente, Alexander Lukashenko, y ha defendido la importancia de "escuchar" y dialogar.
"Pese a la violenta represión por parte de las fuerzas de seguridad bielorrusas, y a los miles de arrestos, las manifestaciones pacíficas masivas han continuado para contestar el resultado declarado de las elecciones presidenciales del mes pasado", ha resaltado Bachelet en su intervención en el debate urgente sobre la situación en el país en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU.
La jefa de Derechos Humanos se ha mostrado "particularmente alarmada por los cientos de denuncias de tortura y otros malos tratos bajo custodia policial, con escasas evidencias de una investigación rápida o una desaprobación oficial de estos incidentes". En lugar de ello, ha añadido, su oficina está recibiendo "indicios preocupantes de que tanto las víctimas como sus abogados se muestran cada vez más reacios a presentar quejas por miedo a represalias".
Asimismo, ha criticado los miles de arrestos y los procesos penales y administrativos que se están abriendo "contra personas que se percibe que apoyan a la oposición". Entre ellas están los miembros del Consejo Coordinador creado por la oposición, cuyos líderes están detenidos o en el extranjero con la excepción de la Nobel de Literatura Svetlana Aleksievich, así como sindicalistas y otros manifestantes.
ROMPER EL CICLO DE VIOLENCIA Y REPRESIÓN
Así las cosas, Bachelet ha defendido que "es vital para el futuro de Bielorrusia romper estos ciclos de creciente represión y violencia" y se ha mostrado "convencida de que la clave más importante para el buen gobierno es escuchar".
"No es solo la clave, también hay que actuar, pero escuchar atentamente y oír las voces variadas de la gente en el contexto de un diálogo genuino es la única manera de garantizar que el Gobierno cubre sus necesidades, lo cual es, después de todo, su obligación", ha añadido.
La expresidenta chilena ha resaltado que "la inestabilidad y el conflicto son destructivos y caros" y la represión "fomenta ambas". "Cuando los gobiernos limitan las libertades públicas y reprimen las voces independientes, se niegan a sí mismos los beneficios del compromiso público y lastran la seguridad y el desarrollo", ha señalado.
En este sentido, ha incidido en que "la sociedad civil es un socio valioso, no una amenaza, y la libre expresión de una pluralidad de opiniones debería ser bienvenida, no reprimida".
DIÁLOGO TRANSPARENTE
Por ello, Bachelet ha instado a las autoridades bielorrusas a cumplir con sus obligaciones en materia de Derechos Humanos y las ha animado a "entablar un diálogo transparente e inclusivo en lugar de violencia" así como "garantizar que no habrá represalias de ningún tipo contra quienes contribuyen con sus ideas y demandas".
Además, ha pedido que cese la violación de derechos fundamentales como la libertad de expresión, información y reunión pacífica y que se libere a quienes han sido detenidos por mostrar su disconformidad o participar en las protestas. "El acoso, intimidación, presión y presunta expulsión de Bielorrusia de miembros de la oposición, incluidos miembros del Consejo Coordinador, debería parar", ha añadido.
En Bielorrusia, según Bachelet, "hay una necesidad manifiesta de reformas, principalmente para avanzar el Estado de Derecho, construir instituciones que rindan cuentas y apoyar el buen gobierno, tras un proceso consultivo inclusivo que dé a la población un papel a la hora de moldear el futuro que quieren".
Por último, ha pedido a las autoridades bielorrusas que faciliten "investigaciones independientes, transparentes, rápidas, efectivas y exhaustivas de las denuncias de violaciones graves, con vistas a garantizar la rendición de cuentas y el acceso a un remedio efectivo para las víctimas".