Los desplazados "no tienen ningún sitio donde ir", ha lamentado la jefa de Derechos Humanos de la ONU
MADRID, 18 Feb. (EUROPA PRESS) -
La Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, ha denunciado los "indiscriminados" e "inhumanos" ataques sufridos por la población civil en el noroeste de Siria, donde más de 900.000 personas han tenido que abandonar sus hogares desde principios de diciembre por la ofensiva del régimen de Bashar al Assad, y ha urgido a las partes a facilitar corredores humanitarios.
La oficina de Derechos Humanos de Naciones Unidas ha constatado la muerte de al menos 298 civiles en las regiones de Idlib y Alepo desde el pasado 1 de enero --al menos un centenar de ellos en los primeros 16 días de febrero--. La mayoría de estas víctimas, en concreto el 93 por ciento, corresponderían a acciones perpetradas por el Gobierno sirio y sus aliados.
Además, más de 900.000 personas se han visto forzadas a moverse, de las cuales un 80 por ciento han ido identificadas como mujeres o niños. La ONU ya valora esta contexto como la mayor crisis de desplazamiento desde que estalló la guerra en Siria en marzo de 2011.
"Familias enteras, algunas de las cuales han cruzado Siria de una punta a otra en la última década, se encuentran de forma trágica con que las bombas son parte de su vida diaria", ha lamentado Bachelet, en un comunicado en el que se ha preguntado "cómo alguien puede justificar este tipo de ataques indiscriminados e inhumanos" contra la población civil.
Su oficina ha confirmado que al menos diez instalaciones médicas y 19 centros educativos se han visto afectados, directa o indirectamente, por el conflicto. Los ataques también han alcanzado los campos improvisados para los desplazados internos, lo que reduce la posibilidad de estar a salvo en cualquier punto de la región.
"Los civiles que huyen de los enfrentamientos se están acumulando en zonas sin refugios seguros y que se reducen cada hora que pasa. Y aún así siguen bajo los bombardeos. No tienen ningún sitio donde ir", ha lamentado la Alta Comisionada de Naciones Unidas, que teme que el balance de víctimas no haga sino aumentar si las partes enfrentadas no toman medidas.
No en vano, los civiles "corren ahora más riesgo que nunca, con pocas esperanzas o garantías de lograr un retorno seguro y voluntario a sus zonas de origen o a otras de su elección", ha agregado.
Bachelet ha reclamado el cese inmediato de hostilidades, así como corredodes humanitarios para que los civiles puedan escapar con seguridad de las zonas en conflicto y las organizaciones puedan repartir la ayuda. En este sentido, ha advertido de que poner en riesgo a la población implica un incumplimiento del Derecho Internacional Humanitario y de los Derechos Humanos.
La Alta Comisionada se ha mostrado "alarmada" por el "fracaso de la diplomacia", que "debería anteponer la protección de los civiles a cualquier victoria política y militar".