SANTIAGO, 7 Jul. (EUROPA PRESS) -
La presidenta de Chile, Michelle Bachelet, ha defendido este miércoles el mecanismo previsto en el proyecto de la reforma educativa, aprobado un día antes por la Cámara de Diputados, que llevará a la gratuidad universal, tras las protestas del colectivo estudiantil, que critica que esta dependa del crecimiento del país y que llegue "a goteo".
La reforma establece un plazo para alcanzar la gratuidad y plantea una fórmula, sin fechas fijadas, para avanzar hacia la total cobertura según el crecimiento económico del país. En medio de las críticas, la mandataria ha asegurado que este es un mecanismo responsable, realista y gradual.
"Es la mejor manera de poder garantizar la gratuidad universal, que no haya vuelta atrás, aunque tengamos que tomarnos un poquito más de tiempo del que hubiéramos querido", ha afirmado Bachelet, según declaraciones recogidas por el diario 'El Mercurio'.
La presidenta ha defendido su postura asegurando que si el Gobierno se compromete a alcanzar un 100 por cien de gratuidad sin tener los recursos para aprobarla, habría una vuelta atrás que el Gobierno, sostiene, no desea.
"Queremos que la educación sea un derecho social, aunque ese derecho lo vayamos gradualmente conquistando para todos", ha explicado.
Tanto las negociaciones como ahora la aprobación del proyecto de ley han levantado numerosas protestas entre el alumnado chileno, que este mismo miércoles se ha vuelto a congregar, en esta ocasión junto al Congreso Nacional, en Valparaíso, para protestar.
Camila Rojas, presidenta de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile (FECH), ha advertido que aunque la reforma haya entrado al Congreso, los estudiantes no se rendirán. "El movimiento sigue vivo", ha asegurado a través de su cuenta de Twitter.
Junto a sus palabras ha añadido una imagen del Congreso, en el que se puede ver una bandera de Chile desplegada desde lo alto con las palabras 'Otra democracia: Educación pública, gratuita y de calidad". La bandera, tal y como informa 'La Tercera', habría sido colocada desde la parte superior del edificio por parte de varios universitarios, junto a los diputados Giorgio Jackson y Gabriel Boric.
La resurrección del movimiento estudiantil, con multitudinarias protestas en demanda de una educación pública, gratuita y de calidad en Chile, ha provocado, entre otros asuntos, que la popularidad de la mandataria caiga en picado hasta situarse en el peor nivel de su historia, el 72 por ciento, según un sondeo de opinión publicado este miércoles por Adimark.