MADRID, 19 Sep. (EUROPA PRESS) -
Las autoridades de Bahréin han acusado este lunes a Qatar de incautarse de forma ilegal tres embarcaciones con 16 marineros a bordo, en medio de las tensiones diplomáticas entre Doha y cuatro países de la región.
El comandante de la Guardia Costara bahreiní, Alaa Siyadi, ha afirmado que Qatar se ha incautado un total de 15 embarcaciones y mantiene bajo custodia a 20 marineros, agregando que algunos casos datan de 2009.
Asimismo, ha pedido "un compromiso con los procedimientos legales, de acuerdo con las convenciones internacionales sobre seguridad marítima", según ha informado la agencia estatal bahreiní de noticias, BNA.
Las autoridades qataríes han confirmado la detención de los barcos de pesca, argumentando que entraron de forma ilegal en sus aguas territoriales y asegurando que los pescadores serán liberados pronto.
Los gobiernos de Arabia Saudí, EAU, Bahréin y Egipto anunciaron en junio la ruptura de sus relaciones diplomáticas con Qatar, acusando a Doha de "apoyar el terrorismo".
A la medida se sumaron después Maldivas, Mauritania, el gobierno de Yemen reconocido internacionalmente, encabezado por Abdo Rabbu Mansur Hadi, el gobierno asentado en el este de Libia. Asimismo, Jordania y Yibuti han reducido su representación diplomática en Doha.
Qatar ha reiterado en numerosas ocasiones su disposición a negociar con estos cuatro países para lograr un acuerdo, si bien todos ellos han manifestado que sus exigencias "no son negociables", reclamando a Doha que las acepte en su totalidad para solucionar la situación.
LA CRISIS DIPLOMÁTICA
Las tensiones entre Qatar y varios países del Golfo se han deteriorado en los últimos meses, a raíz de que QNA publicara unas declaraciones del emir en las que criticaba la postura de los países del Golfo contra Irán y hablaba de "tensiones" con Estados Unidos.
Inmediatamente después, QNA denunció haber sufrido un ataque informático y negó la veracidad de la nota publicada, pese a lo cual medios de Arabia Saudí y EAU continuaron informando acerca de las presuntas declaraciones de Hamad bin Jalifa al Zani.
Este hecho provocó las críticas de Doha, lo que llevó a varios países --Arabia Saudí, EAU, Egipto y Bahréin-- a bloquear el acceso a diversos medios qataríes, entre ellos Al Yazira.
Posteriormente, el fiscal general de Qatar, Alí bin Fetais al Marri, anunció que Arabia Saudí y sus aliados fueron los responsables del ataque informático contra QNA.
"Qatar tiene pruebas de que ciertos iPhones originarios de países que han impuesto un bloqueo sobre Qatar fueron usados en este ataque informático", dijo Al Marri, sin detallar las naciones implicadas.
Las relaciones entre Qatar y otros países del Golfo ya sufrieron un periodo de tensión en 2014 debido al supuesto apoyo de Doha a Hermanos Musulmanes, organización ilegalizada en la mayoría de los países del golfo.
Sin embargo, en dicha ocasión las medidas no fueron tan duras, y sólo implicaron la retirada de los embajadores. En esta ocasión, ha supuesto además la expulsión de ciudadanos del país, así como el cierre de las vías a medios de transporte llegados de Qatar.