Barroso y Van Rompuy celebran el acuerdo histórico y piden su rápida aplicación

BRUSELAS 19 Abr. (EUROPA PRESS) -

El presidente de la Comisión Europea, Jose Manuel Durao Barroso, y el presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, han celebrado el acuerdo histórico que han logrado Serbia y Kosovo bajo mediación de la UE para normalizar sus relaciones y han reclamado su rápida aplicación.

"Aplaudo el avance de Serbia y Kosovo en su diálogo facilitado por la UE. Esto es un acuerdo histórico, que ahora debe ser aplicado rápidamente", ha manifestado Barroso en un comunicado. "Confío en que el acuerdo alcanzado entre las dos partes allanará el camino para que el Consejo tome decisiones sobre los próximos pasos del camino europeo de Serbia y Kosovo", ha precisado.

Los Veintisiete están pendientes de decidir si aceptan abrir negociaciones de adhesión con Serbia y firmar un acuerdo de Asociación y Estabilización con Kosovo, una especie de preacuerdo de adhesión en base al informe que presentará el lunes la Alta Representante de Política Exterior y de Seguridad Común de la UE, Catherine Ashton, aunque las decisiones no se esperan hasta junio, según fuentes europeas.

Barroso ha recordado que "los pueblos de Serbia y Kosovo quieren avanzar y hacer realidad su perspectiva europea", algo a su juicio "crucial para la estabilidad, seguridad y prosperidad del Sureste de Europa y para la Unión Europea".

El jefe del Ejecutivo comunitario ha felicitado a los primeros ministros serbio y kosovar, Ivica Dacic y Hashim Thaçi, "por su compromiso, valentía y visión" tras cerrar el acuerdo en Bruselas y ha elogiado "los esfuerzos sin descanso" Ashton por "su papel de mediadora" y "construir el consenso con éxito".

"Este acuerdo de hoy es histórico y marca un momento importante en las relaciones entre Serbia y Kosovo, así como en sus relaciones con la Unión Europea", ha dicho Van Rompuy en otro comunicado, en el que también ha felicitado a ambos primeros ministros por sus "contribuciones personales y generosas", a los pueblos de Serbia y Kosovo por el pacto y a Ashton por su compromiso para lograr "este avance verdadero".

"Este acuerdo representa un logro enorme dado que las partes se han comprometido a trabajar conjuntamente hacia su futuro en la Unión Europea. La Unión Europea quiere que Serbia y Kosovo tengan éxito", ha asegurado el dirigente belga.

Van Rompuy ha confirmado de nuevo "las perspectivas de Serbia y Kosovo en la UE" y ha recordado que "los Estados miembros de la Unión Europea han fijado una agenda ambiciosa para ambas partes en 2013".

NO HAY ATAJOS

El ex primer ministro belga ha instado a ambas partes a "continuar con el mismo enfoque constructivo respecto a la aplicación de este acuerdo" y ha dejado claro que ver "resultados concretos en la aplicación es crítico".

"No hay atajos. Los criterios necesarios, que permitirán a la Unión Europea, lanzar negociaciones de adhesión con Serbia y negociaciones sobre un Acuerdo de Asociación y Estabilización con Kosovo, deben cumplirse", ha avisado no obstante en alusión a las reformas necesarias para entrar en la UE.

EL ACUERDO

Thaçi y Dacic han cerrado el acuerdo este viernes en Bruselas tras diez rondas de negociaciones mediadas por la UE y el intento fallido del pasado miércoles, cuya ronda concluyó sin acuerdo tras 14 horas de negociaciones.

En virtud del acuerdo, el comandante de Policía regional del norte de Kosovo debe ser serbobosnio y la composición del cuerpo de Policía respetará el peso de la población étnica, según han explicado fuentes diplomáticas.

El Tribunal de Apelaciones de Kosovo también contará con un equipo de jueces serbokosovares para gestionar los casos de la comunidad serbia pero respetando las leyes de Prístina, según ha precisado las fuentes.

Belgrado y Kosovo han aceptado además no obstaculizarse en su objetivo de avanzar en la UE, según han explicado las fuentes. Serbia mantiene su rechazo a que Kosovo entre en organizaciones internacionales como la ONU no obstante.

El Gobierno serbio también ha reclamado que las fuerzas militares de Kosovo no puedan entrar en el norte sin autorización de la población local y ha reclamado que la misión de la OTAN en Kosovo (KFOR) garantice este acuerdo.