Admite que hay que mejorar el nivel de seguridad en el país y subraya que los militares cada vez son más leales a él
MADRID, 23 Abr. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Gambia, Adama Barrow, ha admitido este lunes que tiene cierta "inquietud" por la posibilidad de que miembros de los antiguos 'escuadrones de la muerte' del anterior líder del país, Yahya Jamé, puedan adentrarse en territorio gambiano sin ser detectados, si bien ha confiando en que el Gobierno pueda mejorar en materia de seguridad para afrontar este tipo de amenazas.
En una entrevista concedida a la cadena de televisión pública británica BBC, Barrow ha dicho que no está "preocupado" por la posibilidad de que los llamados 'jungulers' (los escuadrones de la muerte del anterior régimen) entren en el país sin ser detectados por las fuerzas de seguridad pero sí ha admitido que el tema le genera "inquietud".
"Confiamos en que estas personas, que son bien conocidas, no puedan adentrarse en el país sin ser detectadas. Si no son detectadas, suponen una amenaza de seguridad", ha dicho el mandatario gambiano.
Ante la pregunta de si cree que es cierto que todavía el 80 por ciento de los militares del país son leales al anterior mandatario, Barrow ha dicho que esa estimación supone "otra exageración". "No creo que sea así", ha afirmado, para después reconocer que hay "un buen número" de uniformados que siguen apoyando a Jamé y resaltar que "la tendencia está cambiando".
Barrow ha señalado que, en líneas generales, está "preocupado" por la situación del país porque ha pasado "22 años de dictadura", con muchas "cargas negativas" pero se ha mostrado confiado en poder cambiar el rumbo para hacer avanzar a Gambia. "Tenemos una responsabilidad" para hacer avanzar el país, ha señalado.
Preguntado por el arresto de dos generales del entorno de Jamé cuando entraron en el país desde la frontera con Senegal, el mandatario gambiano ha defendido la legalidad de su detención, ha dicho que ya están siendo procesados y que se trata de un proceso judicial "libre y justo".