BRUSELAS 6 Sep. (EUROPA PRESS) -
Bélgica ha pedido este miércoles al Tribunal de Justicia de la Unión Europea un dictamen que aclare si el acuerdo de libre comercio negociado entre la Unión Europea y Canadá (CETA, por sus siglas en inglés) "es compatible con los Tratados de la UE, en lo que afecta a los derechos fundamentales", según ha informado el Gobierno belga.
La entrada en vigor provisional del pacto está prevista para finales de este mes, tras lograr el visto bueno de la Eurocámara, los 28 y Canadá; pero necesita aún la ratificación a nivel nacional de todos los Estados miembros para que sea aplicado de manera definitiva.
Valonia, que amagó con vetar la aprobación del CETA por parte de Bélgica a nivel europeo, puso como una de las condiciones para retirar sus reservas que el acuerdo negociado se sometiera al dictamen del Tribunal con sede en Luxemburgo.
El objetivo es que la Justicia europea se pronuncie sobre la legalidad del nuevo mecanismo para la resolución de litigios entre inversores y Estados (ICS), ideado para corregir el anterior sistema de arbitraje de diferencias que se incluía en los pactos comerciales.
En concreto, el Gobierno belga pide un dictamen sobre la compatibilidad del pacto comercial con el derecho de acceso a los tribunales, el derecho a una justicia independiente e imparcial, el principio general de igualdad y el imperativo de 'efecto útil' del derecho comunitario y la competencia exclusiva del TUE para interpretar el derecho de la UE.
El documento que ha presentado el viceprimer ministro y ministro de Exteriores belga, Didier Reynders, ante el tribunal europeo es el resultado de seis meses de negociaciones entre los poderes federales y regionales en el país.
Con todo, la consulta presentada por Bélgica no afectará a la aplicación temporal del CETA, según ha explicado el Ministerio de Exteriores, ya que las disposiciones sobre las que se pide un dictamen no entrarán en vigor hasta la aplicación definitiva del acuerdo de libre comercio.