MADRID, 24 Mar. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha afirmado este viernes, tras anunciar una serie de bombardeos contra instalaciones utilizadas por "grupos afiliados" a la Guardia Revolucionaria iraní (IRGC) en el noreste de Siria, que no busca un conflicto con Teherán.
"Estados Unidos no busca un conflicto con Irán, pero está preparado para actuar con fuerza para proteger a su pueblo", ha señalado el mandatario estadounidense durante una rueda de prensa conjunta con el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau.
Dichas palabras se producen después de que Biden ordenara una serie de bombardeos contra instalaciones utilizadas por "grupos afiliados" al IRGC en respuesta a varios ataques de las milicias proiraníes contra las tropas estadounidenses en Siria.
Los ataques comenzaron el jueves por la tarde. Un presunto dron iraní disparó contra una instalación estadounidense, dejando un contratista muerto y cinco miembros del servicio heridos. Tras ello, Washington anunció, a primera hora de este viernes, un ataque aéreo de precisión en el noreste de Siria.
El Observatorio Sirio de Derechos Humanos ha informado de que los ataques aéreos de las fuerzas estadounidenses han matado a ocho presuntos combatientes proiraníes, mientras que el balance de víctimas mortales puede aumentar porque hay varios heridos, algunos de ellos en estado crítico.
El organismo, con sede en Londres e informantes en el país árabe, ha explicado que Washington ha dirigido sus ataques contra un depósito de armas en Deir Ezzor, donde habrían muerto seis de las víctimas; y otro escondite de las milicias en las afueras de la ciudad de Mayadin, donde habrían muerto los otros dos.
El viernes por la tarde, tras el anuncio de Washington, ha escalado la situación y se han producido al menos dos ataques más por parte de milicias proiraníes en represalia por los bombardeos estadounidenses anunciados durante la mañana.
En concreto, los ataques han sido en Conoco, una base próxima a yacimientos de petróleo y uno de los enclaves donde las tropas estadounidenses se encuentran desplegadas en labores de ayuda a las fuerzas locales en la lucha contra el ISIS, y en Green Village, situada en la orilla norte del río Éufrates, zona controlada por las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS).