RANGÚN, 21 Ene. (Reuters/EP) -
El Gobierno birmano ha tachado de "lamentable" la decisión de Malasia de convocar a los países miembros de la Organización para la Cooperación Islámica con objeto de discutir la situación crítica de decenas de miles de musulmanes rohingya, una minoría bajo persecución de las autoridades birmanas.
La reunión de este grupo, que aglutina a 57 países musulmanes, ha sido convocada a petición del primer ministro de Malasia, Nayib Razak, quien ha calificado la situación de los rohingya de "tragedia humanitaria" tras constatar que la persecución de las autoridades birmanas ha llevado a 66.000 de sus integrantes a huir a Bangladesh, según cifras de Naciones Unidas.
En respuesta, Birmania ha acusado a Malasia de "promover su agenda política" con esta convocatoria y ha insistido en que su Gobierno solo "intenta salvar vidas y garantizar la seguridad de la población frente a los ataques del nuevo extremismo", según un comunicado del Ministerio de Asuntos Exteriores recogido por el boletín estatal 'The Global New Light of Myanmar'.
Este Ministerio está dirigido por la ganadora del Premio Nobel de la Paz Aung San Suu Kyi, objeto de duras críticas, que la acusan de pasividad ante la crisis histórica que padece esta minoría. El Gobierno birmano argumenta que entre los rohingya se ocultan varios grupos terroristas que intentan atentar contra la seguridad del estado.