LA PAZ 28 Dic. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Cámara de Senadores de Bolivia, José Alberto Gonzales, ha asegurado este martes que su país no obstaculizará la investigación en torno al accidente de avión de la aerolínea boliviana LaMia, que dejó 71 muertos, un día después de que el director general de Aeronáutica Civil de Colombia (Aerocivil), Alfredo Bocanegra, diera a conocer las conclusiones del informe sobre el siniestro, que tuvo lugar el 28 de noviembre.
"Lo ha manifestado nuestro presidente (Evo Morales) y nuestras máximas autoridades", ha afirmado Gonzales en declaraciones a la agencia de información boliviana ABI. "Bolivia no tiene el más mínimo interés de obstaculizar la investigación que se está realizando en Colombia", ha añadido.
La investigación colombiana ha confirmado la hipótesis inicial, que apuntan a que el avión no contaba con el combustible suficiente para recorrer la distancia que separa Santa Cruz (Bolivia) de Medellín (Colombia) y que, además, habría un exceso de carga.
En la rueda de prensa que ofreció para anunciar las conclusiones del informe, Bocanegra insistió en que las únicas autoridades competentes para investigar lo ocurrido son las colombianas, después de que La Paz haya difundido su propio informe, en el que acusa directamente a LaMia y al piloto.
Por su parte, el jefe de la Unidad de Transparencia de Obras Públicas, Gabriel Herbás, ha garantizado que las conclusiones de ambos informes --tanto del de Colombia como del de Bolivia-- son coherentes y coinciden entre sí, si bien ha recalcado que es Colombia quien tiene el principal derecho de investigar el siniestro, al haber ocurrido en suelo colombiano.
"EL GOBIERNO SE LAVA LAS MANOS"
En este contexto, la diputada del Partido Demócrata Cristiano (PDC) Norma Piérola ha acusado al Gobierno boliviano de tratar de evadir responsabilidades al apuntar directamente al piloto.
"El ministro de Obras Públicas, Milton Claros, se lava las manos y acusa a los muertos y a los que no se pueden defender", ha criticado Piérola.
Entre ellos ha hecho referencia a la exfuncionaria de la Administración de Aeropuertos y Servicios Auxiliares a la Navegación Aérea de Bolivia (AASANA) Celia Castedo, a quien están investigando por el suceso y a quien señalaron de ser la persona que autorizó el plan de vuelo del avión.
"El Gobierno boliviano se lava las manos, (pero) quien dio la orden fue la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC) de Bolivia", ha añadido.
El avión, en el que viajaban 77 personas --entre ellas, el equipo de fútbol de Brasil Chapecoense--, se estrelló en un cerro al sur de Medellín, a donde se dirigía para que el club se disputara la final de la Copa Sudamericana, dejando 71 muertos y tan solo seis supervivientes.