El PPE ataca a Borrell por "blanquear" a Maduro pero la UE defiende que la mediación surgió a petición de Guaidó
BRUSELAS, 24 (EUROPA PRESS)
La Unión Europea ha enviado una misión diplomática a Caracas para tratar con el Gobierno y la oposición venezolana que las elecciones legislativas de diciembre cuenten con los requisitos democráticos mínimos, con la vista puesta en mandar una misión de observación electoral de la UE si se aplazan las elecciones.
El vicesecretario general de Asuntos Exteriores, Enrique Mora, y el director para América del Servicio Europeo de Acción Exterior, Javier Niño Pérez, estarán en Venezuela hasta el lunes y entre sus contactos podrían verse con Nicolás Maduro, han informado fuentes europeas.
La UE considera este viaje un "último intento" de mantener el diálogo en Venezuela e impulsar las últimas gestiones del opositor Henrique Capriles para celebrar unas elecciones transparentes. Sobre la mesa está la posibilidad de aplazar los comicios unos meses, algo que viene intentando Capriles y que para la UE sería la consecuencia de que mejoran las condiciones del proceso.
La diplomacia comunitaria no quiere perder la oportunidad de enviar observadores internacionales a Venezuela, algo que no sucede desde hace 14 años. Y defiende que si las elecciones legislativas fueran el 6 de diciembre carecerían de legitimidad, por lo que solo ahondarían la brecha de Venezuela con la comunidad internacional.
La UE defiende que la mediación europea surgió a petición del líder opositor Juan Guaidó y es fruto del compromiso del Alto Representante de la UE para Política Exterior y Seguridad Común, Josep Borrell, de hacer suyas las exigencias de los partidos opositores venezolanos para las elecciones. Pero esta misión, en concreto, busca dar continuidad al trabajo de Capriles, único opositor que tiene contacto directo con el Ejecutivo de Maduro. Además, la diplomacia europea subraya que el Alto Representante cuenta con el mandato del Grupo de Contacto y de los ministros de Exteriores para seguir adelante con esta iniciativa.
QUEJA FORMAL DEL PP
La noticia ha levantado las críticas del PP europeo, que en una carta formal al Alto Representante a la que ha tenido acceso Europa Press, considera la misión diplomática un error estratégico porque "blanquea la dictadura de Maduro" y le ofrece la apariencia de normalidad a un "régimen tiránico".
El presidente del Grupo Popular, Manfred Weber, ha pedido explicaciones a Borrell, alegando que la decisión debilita la posición de la UE con respecto al "régimen" de Venezuela y se produce sin el visto bueno de Juan Guaidó, presidente encargado al que reconocen 25 países del bloque europeo.
"Esto es impensable, igual que sería impensable enviar una misión de la UE a hablar con el régimen de (el presidente bielorruso, Alexander) Lukashenko a espaldas de la oposición bielorrusa. Esto es exactamente lo que esta sucediendo ahora en Bielorrusia", ha advertido la misiva.
Los 'populares' europeos han criticado que la UE ponga sobre la mesa la opción de mandar observadores internacionales sin que haya pasos de Caracas para cumplir los requerimientos democráticos básicos que pide la oposición.
A la vista de los últimos acontecimientos en Venezuela, como la excarcelación de presos políticos, Borrell defiende que hay una "ventana de oportunidad" para encarrilar la situación la situación en el país. Defiende que el envió de observadores sería posible si se "revisa el calendario" electoral, ya que el Servicio de Acción Exterior de la UE necesitaría "cinco o seis meses" de preparación para organizar dicha misión.
"Por el momento no se cumplen las condiciones, pero seguimos pensando que hay una ventana de oportunidad", aseguró el jefe de la diplomacia comunitaria en la rueda de prensa este lunes tras el Consejo de Asuntos Exteriores.
INFORME DE LA ONU
Los esfuerzos de la diplomacia europea llegan después de que se conociera un informe de la ONU en el que se relatan delitos de lesa humanidad en Venezuela, incluidas ejecuciones, torturas y detenciones. Estas violaciones se produjeron, según la ONU, en el marco de un patrón cuyas ramificaciones se extienden hasta el propio presidente Maduro y para el que se podría solicitar la intervención del Tribunal Penal Internacional (TPI).Para los 'populares' europeos esto invalida cualquier esfuerzo diplomático de la UE con Caracas.
En Bruselas muestran su preocupación por los destalles del informe, pero insisten en que el país se encuentra en una situación dramática también a nivel humanitario y la UE está en una situación en la que tiene que mover ficha para intentar mejorar las condiciones en el país y esbozar una salida política a la crisis.
Hace dos semanas el Grupo Internacional de Contacto para Venezuela constató que "no se dan las condiciones" en este momento para unas elecciones transparentes en Venezuela, pero valoró el llamamiento del Gobierno de Maduro a la comunidad internacional para que envíe observadores.
En una declaración el Grupo de Contacto señaló, no obstante, que el actual calendario electoral no permite el despliegue de una misión de observación electoral "ni deja tiempo ni espacio político para que las partes negocien las condiciones para unas elecciones creíbles, libres y justas".