Brasil cierra otras tres plantas de procesamiento cárnico por el escándalo de corrupción

Carne de Brasil
PAULO WHITAKER / REUTERS
Actualizado: martes, 28 marzo 2017 14:01


SAO PAULO, 28 Mar. (Reuters/EP) -

El Ministerio de Agricultura de Brasil ha ordenado este martes el cierre de tres plantas de procesamiento de alimentos en el marco de un caso de corrupción que afecta a las procesadoras de carne y a los inspectores agropecuarios, que autorizaban la venta de los productos sin que estos cumplieran con las normas de calidad establecidas.

Las autoridades de Brasil, el mayor productor de carne del mundo, han cerrado un total de seis plantas de las 21 que están siendo investigadas por las Policía Federal, que ha prohibido las exportaciones y ha señalado que la producción se llevará a cabo únicamente a nivel nacional.

Las plantas se encuentran en el estado de Paraná, en el sur del país, e incluyen unidades de las empresas Souza Ramos, Industria de Laticinios SSPMA y Fábrica de Farinha Carnes Castro, que se encuentran entre las sospechosas de haber adulterado los alimentos.

Los principales países importadores emitieron una serie de prohibiciones en relación con estos productos después de que la Policía de Brasil revelara el 17 de marzo la apertura del caso 'Carne Fraca' ('carne débil', en portugués), que investiga la trama de corrupción en el sistema de inspección de sanidad del Ministerio brasileño de Agricultura.

Según las autoridades brasileñas, las compañías procesadoras de carne habrían pagado a los funcionarios de salud del Gobierno a cambio de no realizar inspecciones o ignorar las malas prácticas desempeñadas por las empresas de la industria cárnica.

No obstante, el ministro de Agricultura, Blairo Maggi, ha asegurado que los investigadores aún no han encontrado ningún producto que pueda ser dañino para la salud tanto en el país como en el exterior.

Por otro lado, Maggi ha aseverado que el país tendrá que enfrentarse a una dura lucha para recuperar su posición en el mercado y la confianza de los consumidores de cara al futuro. El caso ha afectado significativamente a uno de los sectores más sólidos de la economía brasileña, que experimenta actualmente su peor recesión.

Las autoridades de China --el mayor comprador de carne brasileña--, Chile y Egipto retiraron el sábado la orden de suspensión de las importaciones de carne ante un aparente control de la crisis por parte del Gobierno de Brasil.