NUEVA YORK 18 Jun. (Reuters/EP) -
Cientos de mujeres embarazadas nepalíes se encuentran amenazadas por un brote de hepatitis E, que podría ser avivado por la temporada de monzones (de julio a septiembre) en el país golpeado por el terremoto, según han advertido los expertos.
Decenas de miles de supervivientes de uno de los peores desastres en el país del sudeste asiático han sido diagnosticados en riesgo alto por el brote de hepatitis E, enfermedad que afecta principalmente al hígado, y que podría haber sido transmitida a través de las aguas fecales, según han afirmado investigadores del diario médico 'Lancet'.
La hepatitis E afecta a alrededor de 20 millones de personas cada año en el mundo. Para la mayoría de las personas, la infección sigue su curso con algunas complicaciones a largo plazo, pero la tasa de mortalidad es de un 25 por ciento en el caso de las mujeres embarazadas. Los expertos han asegurado que el brote podría cobrarse la vida de más de 500 mujeres en Nepal.
"La hepatitis E se trata de un virus que no se entiende muy bien, pero estamos viendo ahora que es una de las principales causas de muertes maternas en los países donde es común", ha manifestado en un comunicado Alain Labrique, investigador de la Universidad Johns Hopkins.
Los terremotos que golpearon Nepal el 25 de abril y el 12 de mayo se cobraron la vida de 8.800 personas e hirieron a otras 22.000. Las áreas afectadas por el desastre presentan una "tormenta perfecta" de factores --como enormes poblaciones desplazadas con escaso acceso a agua potable, saneamiento y medicamentos básicos-- que pueden provocar la propagación el virus, según han asegurado los expertos.
La vacuna eficaz contra el virus sólo se usa en China. La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha afirmado que necesita más seguridad y datos sobre su eficacia antes de recomendar el uso rutinario de la vacuna, pero ha añadido que se considere su importancia para mitigar o prevenir brotes y para aliviar las consecuencias del virus en grupos de alto riesgo como las mujeres embarazadas.
Los expertos han recordado que ya son varios los brotes de hepatitis E que ha sufrido el país asiático, incluyendo uno en 2014 que afectó a más de 10.000 personas. La comunidad médica ha instado a las autoridades sanitarias nepalíes a realizar una estricta vigilancia de la evolución del virus que permita identificar casos de enfermedad y a solicitar la vacuna para tener reservas de ella.
De acuerdo con la OMS, los síntomas típicos de la hepatitis incluyen ictericia, orina oscura y heces blanquecinas, dolor abdominal, náuseas y vómitos, fiebre y un enorme dolor de hígado.