BRUSELAS 15 Abr. (EUROPA PRESS) -
La Comisión Europea ha anunciado este lunes un compromiso adicional de 355 millones de euros en ayuda humanitaria para Sudán, en el marco de la conferencia internacional de donantes en París, Francia, reclamando esfuerzos a la comunidad internacional para el cese de las hostilidades entre el Ejército y las paramilitares Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF),
Cuando se cumple un año de la grave crisis humanitaria por el conflicto abierto entre dos facciones militares en Sudán que dejan millones desplazados y decenas de miles de muertos, el comisario de Gestión de Crisis, Janez Lenarcic, ha asegurado que el deber de la comunidad internacional es "no mirar a otro lado". Estamos determinados a actuar pero la comunidad internacional tiene que hacerlo de manera conjunta y ahora", ha dicho.
En este sentido, ha confirmado que la Comisión Europea contribuirá a la respuesta humanitaria a Sudán con 355 millones de euros en el año 2024, en una señal de apoyo al pueblo sudanés. Esta cifra refuerza los 72 millones previstos en asistencia humanitaria para 2024 en el presupuesto comunitario, una partida que se canaliza a través de agencias internacionales y organizaciones humanitarias presentes en Sudán.
Lenarcic ha reiterado la petición de que se cumpla el Derecho Internacional y el Derecho Humanitario, subrayando que se tiene que proteger a los civiles y denunciando el asesinato y la violaciones contra ciudadanos sudaneses por motivos étnicos. "Esto tiene que parar", ha remachado.
Junto a él, el Alto Representante de la UE para Política Exterior, Josep Borrell, ha puesto el acento en elevar la presión internacional contra las partes del conflicto y promover una tregua humanitaria para que la ayuda pueda llegar sin trabas a toda la población en situación de necesidad.
El jefe de la diplomacia europea ha apuntado también a la necesidad de que haya rendición de cuentas y de que se sancionen a los protagonistas del conflicto por ir "contra los intereses del país".
Igualmente ha enfatizado la necesidad de continuar una mediación, tras varias iniciativas "que no fueron completas ni coordinadas", que han dejado "mucha libertad" a los beligerantes para evitar compromisos en la mesa de negociación.
Borrell ha señalado que la "fragmentación" en la mediación en Sudán es un problema, tras señalar que los distintos procesos "son demasiados" y recalcar que "ante las aguas revueltas hay ventaja de pescadores", sobre la influencia de Rusia en la zona.