BRUSELAS, 20 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Unión Europea agilizará el proceso para suprimir los visados a los ciudadanos turcos que viajen al territorio comunitario si Ankara adelanta la aplicación del acuerdo de readmisión de inmigrantes irregulares de terceros países, en el marco del plan de acción que esperan sellar para reforzar una cooperación con la que frenar la inmigración irregular y hacer frente a la crisis de refugiados.
La UE ya ha dejado claro que espera "una mejor aplicación" por parte de Turquía de sus acuerdos de readmisión de inmigrantes irregulares firmados con Grecia y Bulgaria y que Ankara deberá adelantar la aplicación de la cláusula del acuerdo de readmisión entre la UE y Turquía que le obliga a acoger a los inmigrantes irregulares de terceros países, que en principio sólo entrará en vigor el 1 de octubre de 2017, si quiere acelerar el fin de los visados.
"Lo que hacemos con la aceleración de la liberalización de visados es agilizar estos dos procesos. Queremos adelantar la aplicación del acuerdo de readmisión con la aceleración de la liberalización de los visados", ha explicado en rueda de prensa la portavoz del Ejecutivo comunitario, Mina Adreeva.
El Ejecutivo comunitario ya ha dejado claro que "no habrá la liberalización de los visados sin la plena aplicación del acuerdo de readmisión" y a principios del año que viene publicará su segundo informe para evaluar los progresos que ha hecho Turquía para cumplir las condiciones para que los Estados miembro acepten suprimir los visados para los ciudadanos turcos. "El progreso está muy vinculado con lo que detallaremos y las fases para la liberalización de los visados", ha explicado la portavoz de Inmigración e Interior del Ejecutivo comunitario, Natasha Bertaud.
La portavoz ha dejado claro que en "algún momento" se suprimirían los visados para "todos" los nacionales turcos pero no desde un primer momento. "El objetivo es empezar por los empresarios para construir la confianza en el sistema y luego ampliar a otras categorías", ha puntualizado la portavoz.
El ministro turco de Asuntos Europeos, Beril Debeoglu, ha mantenido este martes un encuentro "constructivo" con el comisario de Ampliación, Johannes Hahn, en la que han discutido "la vía adelante" en las relaciones entre la UE y Turquía, incluida "la revitalización" de las negociaciones de adhesión entre ambas partes, bloqueadas desde hace años por el conflicto chipriota y las dudas de países como Alemania a la entrada al bloque de Turquía y "los pasos requeridos para la aceleración la liberalización de los visados", ha explicado Andreeva.
Ankara ha exigido para firmar un acuerdo con la UE para reforzar su control sobre la inmigración irregular a Europa que el bloque aporte una ayuda nueva de 3.000 millones de euros, que adelante el fin de los visados para los turcos a 2016 y que se aceleren las negociaciones de adhesión del país, que es candidato a entrar desde 2005.
También ha exigido que la UE le incluya en la lista común de países de origen seguro, lago que permitiría agilizar la devolución de sus nacionales al presumir que no tendrían derecho al asilo, algo que apoya la Comisión Europea pero no algunos países de la UE, entre ellos Reino Unido y Alemania.
Altos funcionarios del Ejecutivo comunitario continúan este miércoles en Ankara las negociaciones del plan de acción conjunto con las autoridades turcas.
Preguntado el Ejecutivo comunitario por el incidente en el que murió un inmigrante afgano abatido por las fuerzas de seguridad cuando trató de entrar en Bulgaria desde Turquía el pasado jueves, Andreeva ha recordado que "hay una investigación en marcha para establecer los hechos" y ha insistido en la necesidad de evitar "la violencia en las fronteras exteriores" de la Unión porque "la violencia nunca es la respuesta a una crisis de refugiados".