BRUSELAS, 13 Jul. (EUROPA PRESS) -
La Comisión Europea ha asegurado este miércoles que "seguirá presionando" para que Estados Unidos y Canadá dejen de exigir visados a los nacionales de algunos Estados miembros pese a que la UE no lo hace con los ciudadanos estadounidenses, pero no tomará medidas de momento por la falta de reciprocidad.
Bruselas examina la situación al menos desde el pasado mes de abril, cuando advirtió de las "consecuencias adversas" que podría tener para la Unión Europea tomar medidas contra estos dos países, pero pidió al Parlamento Europeo y a los Estados miembros que se posicionaran.
En una comunicación publicada ahora, el Ejecutivo comunitario ha informado de que mantiene contactos con las autoridades estadounidenses y canadienses y que cree que no es el momento para emprender medidas equivalentes.
El comisario de Interior e Inmigración, Dimitris Avramopoulos, ha explicado que en sus contactos con Canadá ha visto confirmada una "clara perspectiva" de que el país está dispuesto a "avanzar" hacia una solución en los próximos meses.
Por ello, Bruselas es partidaria de esperar a que la contraparte canadiense presente una propuesta para acercar posiciones en otoño.
En cuanto a Estados Unidos, Avramopoulos ha argumentado que el calendario electoral norteamericano hace conveniente esperar.
La Comisión también ha asegurado que en sus conversaciones con los Estados miembros, aquellos países que no disfrutan aún de la exención de visados por parte de Estados Unidos y Canadá están comprometidos a trabajar para responder a las "preocupaciones".
Estados Unidos exige aún visado a los ciudadanos de Bulgaria, Croacia, Chipre, Polonia y Rumanía, además de contar con restricciones de viaje que pueden afectar a todos los Estados miembros ya que se aplican a quienes tienen doble nacionalidad. Por su parte, Canadá no permite la entrada sin visado en su territorio de rumanos y búlgaros.