BRUSELAS, 24 Ago. (EUROPA PRESS) -
La Comisión Europea ha confiado en que la reunión que mantendrán este lunes la canciller alemana, Angela Merkel, y el presidente francés, François Hollande, en Berlín contribuya a impulsar una solución europea a la creciente presión migratoria que se ha agudizado en el verano en la localidad francesa de Calais, en el Mediterráneo, especialmente en la isla griega de Kos, y en la frontera entre Grecia y la Antigua República Yugoslava de Macedonia.
"Es una muy buena idea que ambos se reúnan para discutir. No vemos ningún problema. Es muy importante, muy útil y espero que (la reunión entre Merkel y Hollande) va a dar un nuevo impulso para hacer avanzar este proyecto", ha defendido en rueda de prensa el portavoz de la Comisión Europea, Alexander Winterstein, preguntado si Bruselas respalda una reunión, al margen de las instituciones.
El Ejecutivo comunitario es el primero que "empuja" para "avanzar" en una solución "europea" a la crisis de la inmigración y trabaja para "superar" las "reticencias" en los Estados miembro y, en todo caso, ve con buenos ojos cualquier contacto o reuniones entre países que ayuden a llegar a "buenas soluciones" y "más rápidamente".
El portavoz ha vuelto a defender las propuestas del Ejecutivo comunitario para contribuir a responder a la creciente presión migratoria como el establecimiento de un mecanismo de reubicación de refugiados "permanente" o la definición de una lista europea de países de origen "seguros" que permitiría acelerar el retorno de inmigrantes que no tienen derecho a solicitar asilo.
El mecanismo de reubicación permanente, ha precisado el portavoz comunitario Christian Wigand, "no afecta" a la normativa de Dublín, que prevé que sea el país donde se pide asilo el que tramite la solicitud e impide pedir asilo en varios países.
"Pedimos un enfoque europeo a este problema", ha concedido, preguntado por la decisión de países de dejar pasar a inmigrantes a través de sus territorios a otros, como en el caso de los inmigrantes que han pasado desde Grecia a la Antigua República Yugoslava de Macedonia, país al que Bruselas ha destinado 90.000 euros en ayuda humanitaria para responder a la presión migratorio, incluido para ayudar a cubrir "necesidades básicas" como atención sanitaria, agua, alimentos y mantas y apoyo al centro de recepción de inmigrantes en Skopje.
El Ejecutivo comunitario ha desplegado también expertos en Sicilia para ayudar a tramitar "más rápido" las solicitudes de asilo y está trabajando para enviar otro equipo en el Pireo, en Grecia, ha explicado Wigand.
Bruselas ya ha avanzado que presentará una propuesta legislativa sobre el mecanismo de reubicación permanente en otoño y en septiembre una propuesta sobre los países de origen seguros.