Espera que el nuevo Ejecutivo cumpla sus compromisos con la UE para generar "confianza"
BRUSELAS, 26 Feb. (EUROPA PRESS) -
La Comisión Europea ha negado estar inquita por los resultados electorales en Italia y ha expresado su "plena confianza" en la capacidad del país de formar Gobierno rápidamente y cumplir los ajustes y reformas comprometidos con la UE para garantizar la "confianza" de los mercados.
"No, no estamos inquietos. Sí, tenemos confianza en la democracia italiana", ha dicho el portavoz del Ejecutivo comunitario, Olivier Bailly.
"Los mercados pueden reaccionar de la forma que quieran", ha proseguido, pero desde la Comisión "confiamos en la capacidad de Italia de formar rápidamente un Gobierno y de respetar sus compromisos europeos", ha subrayado.
El Ejecutivo comunitario ha oído "el mensaje de inquietud" emitido por los ciudadanos italianos en las urnas, pero considera "caricaturesco" que se diga que Bruselas "está ahí solamente para dictar una agenda de austeridad sin ninguna otra medida".
"Apoyamos a Italia y a los italianos, y pensamos que el objetivo principal de la economía italiana es crear crecimiento para dar empleo", ha asegurado el portavoz. Pero ha subrayado que el peso de la deuda frena el crecimiento y por ello es necesario proseguir con los ajustes y reformas para reducirlo.
"Italia ha asumido compromisos respecto a la Comisión y los otros Estados miembros sobre la reducción de su déficit y de su deuda y sobre reformas estructurales para relanzar el crecimiento y mejorar la competitividad", ha resaltado Bailly.
"Para nosotros estos compromisos siguen vigentes, son compromisos de Italia, y la Comisión espera que Italia los cumpla. El respeto de estos compromisos sería un mensaje fuerte de las autoridades italianas para garantizar la confianza de todos en la economía italiana", ha insistido.
En todo caso, el Ejecutivo comunitario ha eludido valorar el mal resultado de la coalición que apoyaba al primer ministro, Mario Monti, que cuenta con el respaldo de la UE. "El Gobierno que todavía está en funciones en Italia ha llevado a cabo reformas extremadamente ambiciosas, a un ritmo sostenido y nosotros pensamos que estas reformas eran indispensables para la economía italiana", ha dicho Bailly.
"No nos corresponde calificar el resultado del primer ministro saliente y la Comisión no va a decir quién ha ganado y quién ha perdido las elecciones. Pero la agenda desarrollada los últimos 15 meses en Italia era una agenda que iba en la buena dirección", ha concluido.