BRUSELAS, 2 Mar. (EUROPA PRESS) -
La Comisión Europea mantiene su preocupación por el ritmo lento con el que los Estados miembros están atendiendo a sus obligaciones con el programa para reubicar a 160.000 refugiados llegados a Italia y Grecia, pero no contemplará tomar medidas sancionadoras al menos hasta el próximo septiembre, cuando expira el plazo de dos años que se fijó al negociar el plan europeo de acogida.
"Si los Estados miembros fracasan a la hora de intensificar los esfuerzos en los próximos meses y no hay resultados tangibles de aquí a septiembre, la Comisión no dudará en hacer uso de sus poderes", ha declarado el comisario de Interior e Inmigración, Dimitris Avramopoulos, al presentar el informe de progresos mensual.
El comisario ha informado de que ha remitido una carta a los ministros de Interior de la UE para recordarles sus compromisos y advertirles de que "tienen una cuenta pendiente" que no pueden dejar de pagar.
Bruselas ha amagado en varias ocasiones con la posibilidad de iniciar expedientes sancionadores contra los gobiernos incumplidores, pero mantiene que su prioridad es convencerles por la vía política para que "cumplan con sus obligaciones legales".
Avramopoulos ha admitido que su aspiración es "convencer" a los Estados miembros, pero que la apertura de procedimientos de infracción "puede ser una opción" más adelante.
Mientras, el informe periódico que publica el Ejecutivo comunitario evidencia que tras año y medio desde que se adoptó el programa de reubicación, el conjunto de la Unión Europea apenas ha cumplido con el 14% de sus compromisos, y ello si se descuentan las más de 50.000 plazas del programa aún por asignar.
Los Estados miembros han recibido en su territorio a 13.546 demandantes de asilo llegados primero a Italia y Grecia para solicitar protección en la Unión Europea.
Francia (2.758), Alemania (2.626) y Países Bajos (1.486) son los países que más plazas han cubierto. España, de acuerdo al mismo recuento, ha recibido a 851 personas, en su mayoría procedentes de Grecia (707).
En el caso de España, además, Bruselas le afea en el informe que "no está presentando compromisos mensuales" de traslados, tal y como se ha pedido a las autoridades de cada país.
Malta y Finlandia son los únicos Estados miembros que van "por buen camino" en cuanto a las cuotas de acogida que asumieron en el reparto del programa comunitario, aunque la Comisión también apunta los esfuerzos de Luxemburgo y Portugal.
España está, junto a Alemania y Bélgica, en el grupo que no ha llegado si quiera a responder al 10 % de sus compromisos, mientras que otros tres países (Hungría, Austria y Polonia) siguen oponiéndose de plano a la iniciativa solidaria y no han recibido a un solo refugiado.