BRUSELAS, 18 Abr. (EUROPA PRESS) -
La Comisión Europea ha reclamado a las autoridades turcas que abran "investigaciones transparentes" tras las "alegaciones de irregularidades" cometidas durante el referéndum constitucional el pasado domingo según los observadores internacionales y ha vuelto a dejar claro a Ankara que la reintroducción de la pena de muerte en el país supondrá "la línea más roja" y "una señal clara" de que el país no aspira a entrar en la UE.
"Hemos tomado nota y examinado atentamente la declaración de las misiones de observación" internacional de la OSCE y de la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa, ha explicado en rueda de prensa el portavoz principal del Ejecutivo comunitario, Margaritis Schinas, preguntado por la evaluación de los observadores internacionales, que han apuntado a irregularidades cometidas durante la consulta y han certificado que ésta no ha respetado los estándares internacionales.
"A la luz del informe de estos observadores, el resultado ajustado del referéndum y las implicaciones de gran alcance de las enmiendas constitucionales, pedimos a las autoridades turcas que consideren los próximos pasos de forma muy cuidadosa y busquen el mayor consenso nacional posible en el seguimiento del referéndum", ha recalcado el portavoz comunitario, que ha informado de que la Alta Representante de Política Exterior y de Seguridad Común de la UE, Federica Mogherini, ha mantenido un contacto telefónico esta mañana con la jefa de la misión de observadores de la OSCE, Tana de Zulueta.
En particular, el Ejecutivo comunitario ha reclamado a "todos los actores a mostrar contención y a las autoridades turcas a lanzar investigaciones transparentes sobre estas alegaciones de irregularidades halladas por los observadores".
"Animamos a Turquía a avanzar más cerca de nuevo a la Unión Europea y no alejarse todavía más y más rápida de nosotros", ha acotado Schinas, parafraseando al presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, que no ha mantenido ningún contacto con el presidente turco, ni tampoco el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk.
"LA LÍNEA MÁS ROJA DE TODAS"
El portavoz ha dejado claro a Ankara de nuevo que la reintroducción de la pena de muerte en Turquía --algo que el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, ha dicho que someterá a referéndum-- "es la línea más roja de todas" y "sería una señal clara de que Turquía no quiere ser un miembro de la familia europea" aunque ha evitado aclarar si la línea roja --que llevaría a la suspensión de las negociaciones de adhesión-- se alcanzaría si gana el referéndum o cuando se reintrodujera de forma efectiva la pena de muerte.
"Eso no es solo una línea roja, esto es la línea más roja de todas", ha avisado el portavoz comunitario, que ha recordado que el rechazo "inequívoco" de la UE a la pena de muerte "es uno de los pilares fundamentales del acervo de la Unión Europea", sus principios y de lo que simboliza Europa en el mundo de hoy.
Schinas ha avisado a Ankara de que "pasar de la retórica a la acción en la cuestión de la pena de muerte, sería una señal clara de que Turquía no quiere ser miembro de la familia europea" y ha insistido en que el país debe "respetar la democracia, los derechos humanos y las libertades fundamentales", incluido el derecho de todos los ciudadanos a un juicio justo.
En todo caso, ha evitado aclarar si las presuntas irregularidades denunciadas en el referéndum tendrán un impacto negativo en los fondos de ayuda a la preadhesión que recibe Turquía y se ha limitado a decir que estos fondos están sujetos a "una condicionalidad estricta" y requieren "aprobación específica" de los Estados miembro, además de precisar que los fondos se destinan a las "reformas que son cruciales para mantener a Turquía en la senda de las reformas", incluido la judicial, así como a inmigración y apoyo a la sociedad civil.
Respecto al acuerdo entre la UE y Turquía para frenar la llegada de inmigrantes y refugiados a Europa a través del Egeo -que Erdogan ha amenazado con romper si la UE no elimina los visados para los turcos-- el portavoz comunitario ha dejado claro que "la Unión Europea continúa cumpliendo sus compromisos" y confían en que Turquía cumpla "todas las condiciones pendientes" que le quedan para suprimir los visados, en total siete, entre ellas cambios a su legislación antiterrorista.
Schinas ha rechazado "especular" sobre la posibilidad de aplazar los cambios en la norma antiterrorista a la espera de una evaluación conjunta de Turquía y el Consejo de Europa sobre los requisitos como sugirió el ministro turco para Asuntos de la UE y ha insistido en que la Comisión mantiene "un diálogo implicado con Turquía para encontrar soluciones, incluido sobre los cambios necesarios legislativos y procedimentales".