BRUSELAS 19 Sep. (EUROPA PRESS) -
La Comisión Europea ha presentado este martes un paquete de propuestas con las que quiere reforzar la capacidad de la Unión Europea para protegerse de la amenaza de ciberataques, lo que pasa por dotar de más medios y apoyo de los Estados miembros al organismo europeo de seguridad en la red para convertirlo en una "Agencia Europea de Ciberseguridad" y también por crear un sistema de certificación que garantice un uso seguro de los productos y servicios en el mundo digital.
"Cada vez dependemos más de los datos (que circulan en Internet), por lo que es fundamental protegerlos de ciberataques. Europa tiene que estar en condiciones de responder a posibles ataques 24 horas al día, siete días a la semana, en todos los Estados miembros", ha resumido en una rueda de prensa el vicepresidente comunitario responsable de la Agenda Digital, Andrus Asnip.
Ansip ha pedido a las autoridades nacionales que cooperen "más intensamente" en la lucha contra el cibercrimen y "superar las diferencias" que existen hoy en la capacidad de cada país de la UE para hacer frente a estas amenazas.
"Somos más fuertes si actuamos juntos, por eso debemos crear una agencia más potente, con un nuevo mandato, con un 50% más de personal y nuevas misiones, ha explicado la comisaria de Sociedad y Economía Digital, Mariya Gabriel.
Se trata en concreto de transformar la actual Agencia de Seguridad de las Redes y de la Información de la Unión Europea (ENISA) en una "Agencia Europea de Ciberseguridad", para la que se aumentaría el presupuesto de forma gradual hasta doblar sus recursos en cuatro años (de 11 a 23 millones de euros) y pasaría de un equipo de 84 personas a contar con 125 miembros.
El objetivo es que ofrezca un apoyo permanente a los Estados miembros y mejore la capacidad de respuesta a ciberataques, por ejemplo con ejercicios paneuropeos de ciberseguridad, y potenciar el intercambio de información e inteligencia.
Este cuerpo, además, serviría para aplicar un nuevo marco de certificación a escala comunitaria para garantizar que los productos y servicios que circulan en la red son "ciberseguros", mejorando así la confianza de los usuarios del 'Internet de las cosas'.
Sería en todo caso un sistema de certificación "voluntario" en todos los Estados miembros, ha señalado Gabriel, para permitir su entrada sin grandes costes a la industria y que el método se adapte a un mundo digital cuya evolución es aún desconocida.
"No se puede eliminar el riesgo, pero sí que podemos hacer que cada vez sea más difícil utilizar medios digitales contra nosotros", ha opinado, por su parte, el comisario de Seguridad, Julian King, quien ha apuntado tres pilares en los que la UE debe avanzar: la "resiliencia", la capacidad de disuasión y la defensa.