SOFÍA, 3 Ene. (DPA/EP) -
La empresa estatal búlgara Bulgargaz ha firmado un acuerdo con la turca Botas para tener acceso al suministro y a las terminales de gas licuado, con vistas a buscar nuevas vías tras la interrupción en 2022 de los combustibles llegados desde Rusia.
El acuerdo, suscrito en presencia de los ministros de Energía de los dos países, tendrá 13 años de vigencia. "Nos permitirá comprar gas de todos los productores del mundo y descargarlo en la parte turca", ha explicado el búlgaro Rossen Hristov, según la agencia BTA.
El Gobierno de Bulgaria estimó ya a finales de 2022 que este acercamiento implicaría para el país acceder a un máximo de 1.000 millones de metros cúbicos de gas al año. Hasta que Rusia inició la ofensiva militar sobre Ucrania, Bulgaria dependía casi en su totalidad del suministro del gas ruso.