BERLÍN, 30 Jun. (DPA/EP) -
El Parlamento alemán tiene previsto votar este mismo viernes sobre la legalización del matrimonio homosexual en el país, un asunto cuyo debate se ha avivado tras el cambio de postura de la canciller, Angela Merkel, quien este mismo lunes sorprendió durante un acto organizado por la revista femenina 'Brigitte' al despegarse del rotundo "no" al que tenía acostumbrados a los votantes a la hora de hablar de matrimonios entre personas del mismo sexo para indicar que estaba abierta a un "voto de conciencia" de los diputados alemanes.
Durante una rueda de prensa celebrada este martes en Berlín, el líder del Partido Socialdemócrata (SPD) y rival de Merkel en los comicios generales del próximo 24 de septiembre, Martin Schulz, señaló que la intención de su formación pasa por forzar una votación sobre el matrimonio homosexual esta misma semana en la Cámara baja, el Bundestag.
La votación podría dar 'luz verde' al matrimonio gay, ya que todos los partidos que podrían formar coalición de Gobierno con la Unión Demócrata Cristiana de Merkel en las próximas elecciones --en septiembre-- advirtieron de que no se asociarían a la canciller si no se llevaba el 'matrimonio para todos' a votación.
Si bien once países de la Unión Europea ya permiten el matrimonio homosexual, Alemania sólo reconoce las uniones civiles.
"Deseo orientar el debate en una dirección que plantee una decisión de conciencia, más que querer imponer algo", manifestó la mandataria el lunes, en un claro giro de su habitual retórica.
En la última semana había aumentado de forma considerable la presión sobre los conservadores de Merkel en relación con la legalización de la equiparación de derechos en Alemania entre personas del mismo sexo.
El domingo, en su Congreso extraordinario, el SPD fijó el matrimonio homosexual como condición para renovar una nueva alianza tras las elecciones legislativas que tendrán lugar en septiembre.
Desde hace años, las formaciones que ocupan el banquillo de la oposición, Los Verdes y el partido La Izquierda, junto con el Bundesrat --la Cámara de representación de los estados federados-- persiguen que se apruebe un proyecto de ley que equipare los derechos de todos los ciudadanos al matrimonio, independientemente de su orientación sexual.
No obstante, el partido conservador que dirige la canciller Angela Merkel, de corte conservador, se ha resistido a aprobarlo.
En Alemania, desde 2001 están permitidas las uniones civiles de personas del mismo sexo pero los homosexuales casados no gozan de plena igualdad jurídica y se les niegan determinados derechos, por ejemplo, en áreas como la adopción.
De hecho, durante la anterior campaña electoral a la Cancillería, en 2012, Merkel rechazó de pleno la adopción por parte de parejas del mismo sexo alegando como argumento el bienestar de los niños.
Una encuesta publicada en enero por la Oficina Federal Antidiscriminación reveló que un 82,6 por ciento de los alemanes está a favor de permitir el matrimonio entre personas del mismo sexo.