WASHINGTON 6 Dic. (Reuters/EP) -
La Cámara de Representantes de Estados Unidos ha aprobado este martes un texto legal que incluye la reducción de las ayudas económicas a la Autoridad Palestina en un intento por presionar al presidente, Mahmud Abbas, para que retire el pago a los familiares de presos palestinos y tome las medidas necesarias para reducir la violencia en la región.
Según la medida, que fue aprobada a principios de agosto por la Comisión de Asuntos Exteriores del Senado con 17 votos a favor y cuatro en contra, Washington podría reducir drásticamente los 300 millones de dólares (253 millones de euros) en ayudas a la Autoridad Palestina si el Senado da luz verde al borrador.
El proyecto ha sido bautizado como ley Taylor Force en honor a un militar estadounidense de 29 años que murió tras ser apuñalado por un palestino durante una visita a Israel en 2016, motivo que impulsó la presentación de la ley.
La intención de la normativa es restringir la ayuda económica para impedir que se sigan realizado pagos de unos 3.500 dólares al mes (3.000 euros) a los familiares de aquellos palestinos que han muerto o han sido encarcelados por las autoridades israelís, un pago que según Estados Unidos supone una "recompensa" por crímenes violentos llevados a cabo por palestinos en Oriente Próximo.
"Este pervertido sistema de pagar para matar utiliza una escala resbaladiza. Cuanto mayor es la condena, mayor es la recompensa. Los mayores pagos van para aquellos que reciben las sentencias más largas, aquellos que muestren una mayor brutalidad", ha aseverado el congresista republicano Ed Royce, que preside la comisión del senado.
La familia del atacante que mató al militar estadounidense sigue recibiendo un pago mensual compensatorio dado que murió a manos de la Policía israelí, según han indicado varios miembros de la comisión.
El texto tendrá que ser aprobado por el Senado antes de llegar al presidente estadounidense, Donald Turmp.
Por su parte, la Autoridad Palestina ha destacado que no tiene intención alguna de suspender los pagos, que suponen un alivio económico para las familias de aquellos presos palestinos que se encuentran en las cárceles israelíes por luchar contra la ocupación de los territorios o por estar relacionados con la causa palestina.
A pesar de que la medida ha sido enmendada para dar cabida a una serie de excepciones --entre las que se encuentra el envío de fondos para proyectos hidrológicos y la vacunación de niños--, varios congresistas se han mostrado en contra de la ley y han señalado que cortar la ayuda económica sólo provocará un aumento de la pobreza y la inestabilidad en Cisjordania y la Franja de Gaza, lo que a su vez se traduciría en un aumento de la violencia.